miércoles, 18 de noviembre de 2009

[OneShot] I need you... I love you



Titulo: "I need you... I love you"
Genero:
Yaoi
Pareja: Inoo Kei y Arioka Daiki
Extensión: One Shot
Autora: Ayaa


~ I need you... I love you~
Era una tarde normal de trabajo para todos, habiamos ensayado hasta el cansancio, como siempre, entre todos nos apoyabamos con las dificultades que teniamos con algunos pasos, mis errores eran pocos, estaba decidido a mejorar cada vez más, asi que un error no era aceptable para mi en lo absoluto.
Pero como era de esperarse, por mi exceso de esfuerzo en esta practica, termine completamente exausto, asi que antes de que nos dieran el pase de salida, me tumbe en un rincon, tome mi botella con agua y observe a los que seguian ensayando los pasos que mas se les dificulataban.
Dentro de los que se encontraban practicando estabas tu, al parecer no estabas al cien el dia de hoy y eso me extrañaba tratandose de ti, sin darme cuenta, mi mirada se quedo clavada en cada uno de tus torpes movimientos, ¿Que te estaba sucediendo?
En ese instante, una amigable voz me saco de este pensamiento que comenzaba a agobiarme.
-Inoo-chan, lo has hecho muy bien el día de hoy-
-Gracias Hikaru-kun- Dije con una debil sonrisa, estaba demasiado cansado como para sonreir demasiado.
-Estas hecho polvo ¿cierto?- Pregunto Hikaru dandome una palmada en la pierna.
-Bastante- Respondi debilmente, despues con un poco de pereza destape mi botella con agua y bebi un poco.
-Iré a preparame, ¿no vas?- Me pregunto Hikaru con un poco de entusiasmo, con gusto hubiese aceptado de no ser que las piernas me pesaban demasiado para ponerme de pie, así que solo me limite a negar con la cabeza.
-De acuerdo, entonces me iré primero-
Dicho esto, Hikaru se puso de pie, se encontro con Chinen en la puerta y ambos salieron del salón de practicas.

Poco a poco todos iban saliendo, hasta que solo quedaban Yamada, Takaki, Yuto y tu, yo aún seguia tumbado en mi rincon, era como si inconsientemente mi cuerpo te estuviese esperando, claro que obviamente yo no me daba cuenta de ese hecho aún.
A diferencia de días anteriores, hoy estabas demasiado distraido, pude darme cuenta que Yamada y Yuto te indicaron el mismo movimiento mas de cinco veces hasta que lograste dominarlo un poco, ¿Que te estaba ocurriendo?

Cuando me di cuenta, ya solo quedaban Yuto y tu practicando, yo aun seguia tumbado en el suelo sin moverme ni decir absolutamente nada, era como si yo formara parte del poco mobiliario del salón, hasta que Yuto logro percatarse de mi fantasmal presencia.
-Inoo-kun, ¿Aún sigues aqui?-
Con algo de pereza y una sonrisa falsa logre responder.
-Asi parece-
-¿Por que?-
Esa era una buena pregunta, no había ningun motivo para seguir ahi, por mas que queria levantarme e irme mi cuerpo no reaccionaba, era como si algo me estuviese reteniendo en ese lugar.
Al analizar esto, simplemente hice una cara de que ni yo sabia el por que, Yuto se quedo conforme con aquella expresion y con una sonrisa se despidio de mi.

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No lograba concentrarme en lo absoluto, desde que comenzaron los ensayos, por primera vez me sorprendiste, habías cambiado muy rápido, tus movimientos eran mucho mas agiles que los mios, dominaste rapidamente la coreografia,
Sin darme cuenta toda mi atencion estaba en cada movimiento tuyo, tanto que no ponía la atencion suficiente a lo que debia hacer realmente, esto no era normal en mi y definitivamente no estaba bien.
Cuando me di cuenta, tu ya te encontrabas descansando en un rincon, como lo suponia te habias sobreesforzado mas de lo normal y por consecuencia estabas exausto, era obvio.
Al verte solo ahi sentado, tuve el deseo de detenerme e ir a conversar un rato contigo, simplemete deseaba saber el motivo por el cuál habías mejorado bastante, deseaba felicitarte y ver tu sonrisa llena de orgullo.
Pero como si leyera mi mente, Yabu me hecho una mirada bastante fría, la cuál me indico que no debía moverme hasta que algo de progreso se notara en mí, así que atado a mi responsabilidad, solo vi como Hikaru se acercaba a ti y ambos conversaban, pero pude notar que tu sonrisa era falsa, sin animos, aquello me causo un poco de desconcierto, lo que provocó que me distrajera de nuevo.

Pasado el tiempo, tan solo quedabamos Yuto, Yamada, Takaki y yo, al notar mi torpeza, Yamada se acerco a mi.
-¿Que ocurre Arioka-kun?-
Me sentía avergonzado, el tener que recurrir a la ayuda de Yamada, quien es menor que yo, no era mi mejor logro, pero viendo la situación en la que me encontraba, el no pedirle ayuda sería una idea demasiado tonta de mi parte.
-Bueno, es que el paso de la vuelta... despues de este movimiento... me confude- Explique haciendo los movimientos previos que ya me sabía.
Al ver que Yamada me estaba ayudando, Yuto se acercó y entre los dos comenzaron a ayudarme, esto si que era vergonsozo, trataron de explicarme el mismo movimiento demasiadas veces, esto no estaba nada bien.
-¿Que ocurre Dai-chan? Hoy estas muy distraido-
Me dijo Takaki mientras tomaba un poco de agua, avergonzado solo me disculpe y despues de unos cuantos intentos más, logre sacar aquel movimiento correctamente, después de eso Takaki y Yamada salieron del salon, ahora solo quedabamos Yuto y yo,
La compañia de Yuto no duro demasiado, mientras comenzaba la coreografia desde el comienzo observe como Yuto se acercaba contigo para despedirse, instantes después solo quedamamos tu y yo, al darme cuenta comence a sentirme realmente nervioso, al dar una vuelta cai al suelo torpemente, estaba cansado, asi que sin animos de ponerme de pie me quede ahi, tumbado en el suelo mirando hacia el techo.

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Yuto acababa de salir, así que tan solo quedabamos tu y yo, solos, esto causo que mi estomago experimentara un movimiento extraño, y no exactamente de hambre, eran nervios, no me movi, solo decidi observarte fijamente practicar, hasta que giraste de la forma incorrecta, y por concecuensia caiste al suelo, quice esperar a que te pusieras de pie por tu cuenta, imagine que te sentirias como un perdedor si me acercaba a ayudarte, pero al ver que no te levantabas y que seguias en el suelo mirando hacia el techo, me asute, ¿y si te habias lastimado?
No dude más y me puse de pie, logre darme cuenta de que las piernas no me pesaban más, me levante tan rapido que me sorprendi de mi mismo.
Al acercarme a ti te pregunte seriamente.
-Dai-chan... ¿te encunetras bien?
No respondiste, te quedaste observando sorpresivamente mi rostro, como si no quicieras que hubiese sido yo quien te viera fallar de esa forma.
No quice incomodarte más asi que sin decirte nada mas, tome delicadamente tu brazo y lo pase por mi cuello, al sentarte en el suelo pase mi mano por tu cintura y ayude a que te pusieras de pie.
Cuando ya estabas de pie aun apoyado en mi, pude darme cuenta que en el momento en que nuestras miradas se cruzaron nuestros rostros estaban demasiado cerca el uno del otro, esto provoco que mi corazon comenzara a latir con una fuerza impresionante,

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Al estar tumbado en el suelo, me senti completamente derrotado, estaba a punto de intentar cerrar mis ojos y reflexionar acerca de mi falta de habilidad cuando escuche tu preocupada voz decir mi nombre.
-Dai-chan... ¿te encuentras bien?-
No sabia que responder, estabas demasiado cerca de mi derrotado cuerpo, me mirabas fijamente a los ojos, mi cabeza entro en un shock indescriptible a causa de tu cercania, no sabia como reaccionar, estaba muy nervioso y la cabeza comenzaba a darme vueltas.
Al no recibir una respuesta, pude ver como tu mirada se llenaba de preocupación, deseaba decirte que no te preocuparas, que estaba bien, que nada me habia pasado, que no me habia caido tan feo como aparentaba, que tan solo estaba algo cansado, pero justo en ese momento me tomaste del brazo pasandolo por tu cuello y de un solo movimiento me sentase para despues rodear mi cintura con tu otro brazo y ponerme de pie.
Este contacto me dejo completamente sorprendido y sin saber como reaccionar, tus manos eran calidas y firmes, mas sin embargo no me lastimaba.
Cuando me pusiste de pie levante mi mirada para verte, nuestros rostros estaban demasiado cerca el uno del otro, estaba mas nervioso aun, podia sentir tu respiracion muy cerca de mi rostro, podia percibir tu agradable aroma, sentia que mi corazon podria salir de mi pecho en cualquier momento si esto continuaba asi, estaba latiendo demasiado rapido que comenzaba asustarme, de no ser por que mi corazon latia con demasiada rapidez podria jurar que pude sentir que el tuyo latia de la misma manera, ¿que me estaba ocurriendo?

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Ambos se encontaban demasiado cerca, Inoo estaba completamente absorvido por la mirada nerviosa de Daiki, y este se encontraba perdido en la confundida mirada de Inoo.
De repente, Daiki intento safarse del cuerpo de Inoo.
-Gracias...-
Dijo tratando de esconder su ruborizado rostro
-No fue nada...-
Respondio Inoo con el mismo nerviosismo
-Si... si quieres puedes irte, yo me quedare un rato más-
Escuchar que Daiki aun seguiria practicando lo preocupaba.
-¿Piensas seguir? ¿No crees que fue suficiente por hoy?

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No podia creer que el aun insistiera en seguir practicando, era logico que estaba totalmente cansado y necesitaba detenerse.
-Solo será un poco más, hasta que domine lo que me falta-
Era obvio que le faltaba bastante, si el seguia ensayando no terminaria muy bien, pero no lograba encontrar la manera de convenserlo de que se detuviera, por mas que le insiti no me hacia caso, llego al punto de comenzar a practicar mientras me decia que solo practicaria un poco mas, que estaria bien.
Obviamente yo no estaba conforme con eso, no podia seguir viendo como se castigaba de esa manera.
-Arioka-kun-
Le dije con voz firme, su expresion hizo que se me oprimiera el pecho, era la primera vez que lo llamaba asi y con ese tono de voz tan fime, frio y molesto.
-¡Detente de una vez!-
Estaba molesto, no soportaba verlo asi, el era una persona demasiado importante para mi, y verlo esforzarse de esa manera era demasiado para mi.

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Al escucharlo decir mi nombre de esa forma, provoco que me detuviera practicamente en seco, el jamas se habia dirigido a mi de esa forma, cuando me suplico que me detuviera pude persivir en su voz demasiada preocupasion, ¿en realidad mi apariencia era tan patetica para que el se preocupara por mi de esa forma? ¿tan deprimente era verme?
Estos pensamientos solo provocaron un vacio dentro de mi, esto podria soportarlo de cualquier persona menos de ti, eras demasiado importante para mi, mas de lo normal, podria casi asegurar que yo... bueno, no podia aceptarlo, sabia que el tener este sentimiento estaba mal.
Hundido en una melancolia enorme, no pude evitar el responderte con frialdad.
-No me detendre, si no tienes nada que hacer aqui porque no mejor te vas!-
Estas palabras estaban faltas de peso para mi, eran palabras vacias que salian de mi boca sin darme cuenta, solo haste que vi tu mirada llena de tristeza recapacite de lo que acababa de decirte, ahora te habia lastimado, definitivamente hoy no era mi dia.

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Nunca imagine que tus palabras pudieran ser tan hirientes en unos segundos, senti como el corazon dejaba de latir, el frio comenzaba a recorrer todo mi cuerpo, en ese momento no sabia que decir, al parecer la persona mas importante para mi no deseaba tenerme a su lado, me habia convertido en una molestia para el, ¿pero por que me dolia tanto? ¿por que?

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En ese momento, con la mirada baja, Inoo se dio media vuelta, y sin decir una palabra más, salió del salón, con pasos lentos, como si tuviera los pies llenos de plomo y cada paso le costara mas energia de la normal, estaba deshecho, Daiki lo habia lastimado con sus frias palabras.
Mientras tanto, Daiki solo observo com Inoo salia del salon, al verlo cerrar la puerta detras de si, pudo sentir como todo su cuerpo pesaba demasiado, acababa de herir a la persona que mas queria.... a la persona que amaba.
En ese momento cayo sobre sus rodillas al suelo, no podía creer lo que acababa de hacer, no queria aceptar lo que acababa de hacer.
Se tiro por completo en el suelo, recostandose completamente de lado, pegando su mejilla al frio suelo y pegando sus rodillas a su pecho abrazando sus piernas, hundiendose en un vacio que el solo habia abierto.

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Me encontraba aqui, tirado sobre el frio suelo, hundido en un vacio deprimente, la mirada de Inoo no salia de mi cabeza, aquellos ojos llenos de tristeza y decepsion, seguramente el me odia en este preciso momento, me lo tenia mas que merecido, lo habia lastimado de la forma mas cruel, el tan solo deseaba ayudarme, mostrarme su apoyo y yo... y yo solamente le respondi con las palabras mas hirientes que pudieron salir de mi boca, me sentia como un idiota por lo que acababa de hacer.
Mientras seguia ahi, en el suelo, todo lo que he pasado con el desde el primer dia que nos conocimos comenzo a pasar por mi mente como si estuviera viendo una pelicula de toda mi vida, era una linda pelicula hasta que la imagen de lo que acababa de pasar llego, ¿Como pude ser capaz de hablarle asi? ¿¡Por que demonios no acepto de una vez que lo amo con todo mi ser y me dejo de estas tonterias!?
Esto ultimo hizo que poco a poco el enorme vacio comenzara a hacerse mas pequeño, lo habia dicho, con todas sus palabras, lo habia aceptado completamente, lo amaba, no, lo amo.
Esta conclusion fue como una luz dentro de mi, fue como si un boton se hubiese presionado dentro de mi activando la bateria que necesitaba para despertar, necesitaba decirselo, disculparme con el y expresarle este sentimiento, no podia perder mas mi tiempo.
Rapidamente me puse de pie, senti mi cuerpo completamente ligero, definitivamente estaba como nuevo, esto era algo que solo el lograba causar en mi, el era como mi fuente de energia personal, obviamente no podia perderlo asi, necesitaba estar a su lado, tenia que alcanzarlo y disculparme para despues decirle lo que siento, no podia perder mas mi tiempo.

Al abrir la puerta, di un paso y me sorprendi bastante, ya me habia preparado para correr con todas mis fuerzas, pero eso no fue necesario, pude darme cuenta, al abrir la puerta, de que el estaba de pie justo a un lado, recargado en la pared con la mirada perdida, al parecer el sonido de la puerta lo acababa de sacar del transe en el que se encotraba.

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En cuanto sali del salon, no pude irme, en cuanto la puerta se cerro mis piernas no repondian, con mucho esfuerzo logre hacerme a un lado y me recarge en la pared, estaba perdido, esa mirada tan fria en su rostro me tenia fuera de mi, no me lo esperaba.
Este inmeso dolor dentro de mi era tal, que trataba de comprender el porque, me puse a pensar que si esto hubiese pasado con cualquier otra persona no me sentiria tan mal como en estos momentos me sentia, entonces pude darme cuenta de lo importante que era el para mi, de que necesitaba de esa sonrisa para poder sobrevivir, que solo con el los dulces eran mas deliciosos de lo normal al igual que la comida, que solo con el estaba totalmente tranquilio, con el podia ser realmente yo, lo amaba, no, lo amo demasiado, es realmente lo que necesito para estar completamente bien.
Antes de decidir entrar y decirle lo que sentia, aun sabiendo que estaba molesto conmigo, el sonido de la puerta me saco completamente de mis pensamientos y... ahi estabas, de pie saliendo de la puerta, estabas algo agitado pero sorprendido de verme ahi.

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Ambos se miraron fijamente, Daiki estaba sorprendido de ver a Inoo de pie junto a la puerta, al mismo tiempo se aliviaba ya que no tendria que ir a buscarlo, estaba justo frente a el.
Inoo estaba sorprendido de ver a Daiki salir con tanta prisa y de la forma en la que este lo observaba.
-Yo...-
Dijeron los dos al mismo tiempo, se observaron fijamente y el silencio aparecio, pero Daiki no estaba dispuesto a dejar las cosas en el silencio, sabia que habia cometido un error y haria todo lo posible para arreglar las cosas.
Asi que lentamente se acerco a Inoo, al estar frente a el, su mirada seguia clavada en la del mayor.
-Inoo-chan yo...-
-Dai-chan...-
Ambos no sabian por donde comenzar, Inoo sabia muy bien que si no lo decia ahora, jamas podira decirlo de nuevo.
Daiki suspiro profundo, era este el momento de hablar.
-Inoo-chan yo... primero quiero disculparme por lo que te dije hace un momento, lo que dije en realidad no queria decirlo, no se explicarte bien por que lo dije pero quiero que me perdones-
-No te disculpes Daiki, en realidad yo....-
-¡Quiero estar a tu lado!-
Daiki dijo esto tan sorpresivamente que dejo a Inoo sin palabras.
-¿Eh?...¿Que... que quieres decir... con...-
La mirada de Daiki expresaba preocupacion, y con el rostro levemente ruborizado dijo con voz firme.
-Me he dado cuenta que eres la persona que mas quiero en este mundo, que te necesito a mi lado mas que a nada, que eres la unica persona en mi mente y que yo...yo... yo te amo, te amo mas de lo que puedo imaginar, te necesito a mi lado-

Inoo no podia creer lo que estaba escuchando, no pudo ocultar esa expresion de sorpresa ante la declaracion de Daiki, no podia creer que se le adelantara de esa manera, esto provoco que una calidez recorriera todo su cuerpo, llenandolo de una infinita felicidad.

Al no recibir ninguna respuesta, bajo deprimido la mirada, al menos lo habia intentado con todas sus fuerzas, sintiendose derrotado, aun con la mirada baja, se dio me dia vuelta, en ese momento pudo sentir como Inoo lo jalaba del brazo y con un solo movimiento lo acercaba dulcemente a el pegandolo a su cuerpo y abrazandolo con dulzura, había anhelado demasiado este momento que no podía creerlo al principio, pero después de darse cuenta de que las palabras de Daiki eran reales, se sentía sumamente feliz.

Tener a Daiki entre sus brazos era algo que solo ocurrio una vez en un sueño, pero esta vez el calor del menor era real y no era una simple almohada.
Dulcemente se acerco a su oido y le susurro tiernamente.
-No sabes cuanto he esperado por esto, eres la persona que mas me importa, gracias por existir y estar a mi lado, gracias por amarme tanto como yo a ti.
Al escuchar estas palabras una sonrisa se dibujo en su rostro y correspondo a aquel delicado abrazo aferrandose con ambas manos a la espalda de Inoo.

Despues de unos instantes, ambos se sepraron un poco, y mirandose fijamente a los ojos, sellaron aquel momento con un profundo beso, al principio solo fue el roce de sus labios, pero poco a poco ambos abrieron lentamente sus bocas, haciendo mas profundo aquella union, sellando asi aquel momento dulce.

Al fin se habian expresando lo que tenian guardado en su interior, la carga en sus corazones se habia vuelto mas ligera, eran libres, libres para amarse sin temer a nada, libres de vivir este momento y muchos mas juntos, como dos personas que se aman desde el primer dia en que sus corazones se encontraron, aunque ellos sabian, que desde mucho antes, este sentimiento existio, solo que hasta ahora podia comenzar con mas profundidad, este amor que comenzaba y que no tendria fin.

FIN

sábado, 14 de noviembre de 2009

[OneShot] No te dejaré ir



Titulo:
"No te dejaré ir"
Genero: Yaoi
Pareja: Nakayama Yuma y Chinen Yuri
Extención: One Shot
Autora: Ayaa


No te dejaré ir
En una asoleada mañana, Nakayama Yuma se despertó con mucho esfuerzo, la noche anterior no había podido dormir bien, y es que la noticia de que sería protagonista de un drama lo tenía tan emocionado que se había pasado toda la noche repasando sus diálogos para comenzar a grabar, aunque las grabaciones comenzarían dentro de un par de semanas, estaba emocionado.

Al llegar a la compañía donde trabajaba, Johnny Jimusho, lo llamaron de inmediato a la oficina del ‘jefe’, le esperaban nuevas noticias.
Al entrar a la moderna sala de juntas de aquella enorme empresa, lo primero que vio al entrar fue a Ryosuke Yamada, el cuál lo saludo con una enorme sonrisa.
-Buenos días Yuma-kun-
-Buenos días Yamada-kun-
Al tomar asiento junto al chico, ambos comenzaron a platicar un poco, y es que aunque ya se conocían desde tiempo atrás, casi no se frecuentaban, por lo que tenían tema de conversación de sobra. Minutos más tarde, cuatro chicos entraron juntos a la misma sala, uno de ellos saludando alegremente, como de costumbre, a Ryosuke y a Yuma.
-Buenos días chicos-
-Buenos días Kento-kun- Saludó Yuma al chico alegre.
Los demás saludaron de igual forma y tomaron asiento frente a los chicos, enseguida, los seis se pusieron a conversar. Más tarde, el último chico llego corriendo, llegando justo a tiempo, ya que detrás de él, no tardo en entrar el ‘jefe’.
Al verlo entrar, la mirada de Yuma se perdió por completo, hacía tanto que no veía al pequeño chico, ahora no tan pequeño a comparación con la primera vez que lo había visto, esta vez, había crecido, sus facciones ya eran más maduras que antes y su voz también había cambiado, estaba totalmente impresionado.
El pequeño al sentir la mirada penetrante de Yuma, sintió un nerviosismo extraño recorrer todo su cuerpo, era diferente al Yuma que el había conocido años atrás, era más alto, más apuesto, y su mirada le fascinaba, aquellos ojos rasgados eran hermosos y su tono de voz seductor.
Al esquivar la mirada penetrante de Yuma, trato de refugiarse en Ryosuke, sentándose a su lado de inmediato.
-Chinen-kun, llegas tarde- Le dijo Ryosuke con un leve tono de regaño y a la vez de burla.
-Olvide que tenía que venir y me quede dormido- Respondió torpemente con una sonrisa.
Yuma estaba concentrado en una plática absurda con Kento acerca de las grabaciones, puesto que este también tendría su pequeño papel en dicho drama. Pero en cuanto el ‘jefe’ comenzó a hablar, todos de inmediato guardaron silencio y se dispusieron a escuchar con atención lo que tenía que decirles.
-Seré breve. A partir de hoy ustedes integraran un nuevo grupo temporal con motivo de apoyar a los jugadores de voleibol, ehm…- En eso, hizo una seña a una de sus asistentes para que esta les entregara unos papeles a los chicos. –Aquí están las indicaciones, fechas de lanzamiento y todo lo que tendrán que hacer en esta temporada, incluyendo el nombre que tendrá este grupo temporal, si no hay mas preguntas, esto es todo- De inmediato el señor se puso de pie, se acomodo su fino abrigo y salió de la sala, dejando a los chicos en silencio y leyendo con detenimiento los detalles de dicho grupo temporal.
-“Eh?... ¿Grabaremos un video? ¿Presentaciones en vivo? ¿Un mes?”- Yuma estaba emocionado y a la vez nervioso, pasaría prácticamente más de dos meses junto a Chinen y los demás, no sabía si ponerse a brincar de alegría o ponerse a pensar en lo que estaba pasando con el.
Al mismo tiempo, Chinen experimentaba las mismas emociones, y tímidamente, le dirigió una mirada a Yuma, el cuál parecía estar leyendo muy atentamente dichos papeles, sin darse cuenta, se quedo observado al chico por unos minutos, hasta que Ryosuke lo sacó de aquel transe.
-¿Me preguntó… por que nosotros?-
-¿Eh?- Dijo Chinen tratando de comprender la pregunta de Ryosuke.
-Yamada-kun tiene razón- Intervino Kento. – De nosotros lo comprendo, ya que aquí también dice que los B.I shadow filmaremos otro video pero solo con Yuma-kun, en cambio, ustedes solo estarán con nosotros para una sola canción que será la que usaran para lo del voleibol, entonces, como ustedes ya forman parte de Hey Say Jump, pues… ah… ya me confundí- Dijo Kento mientras se rascaba torpemente la cabeza.
-Lo que Kento-kun intenta decir es que como ustedes dos ya forman un grupo, es extraño que solo ustedes estén con nosotros y no hayan sido todos los de Hey Say Jump los elegidos para lo del voleibol- Explico Yuma, al notar que Chinen lo miraba fijamente, desvió de inmediato la mirada para sonreírle a Ryosuke, quien solo asintió con la cabeza.
-Pero así están las cosas, así que por ahora, Yoroshiku nee*!- Finalizó Ryosuke con una pequeña reverencia, los demás respondieron de igual forma y después todos salieron de aquella sala.
El último en salir fue Chinen, quien aún no podía creer que se estuviera sintiendo tan nervioso por haber visto a Yuma, no se explicaba el por que evitaba su mirada, y ahora que trabajarían juntos por algún tiempo, lo ponía aún más nervioso, simplemente no comprendía ni sus propias emociones.
Unos días después, Yuma iba llegando al estudio de grabación, primero grabaría con Yamada y Chinen la canción para el voleibol, después con los B.I shadow algunas partes, era un proceso tardado y le esperaba un largo día, así que entro a la sala de grabación y tomo asiento en uno de los cómodos sillones, había sido el primero en llegar, así que aprovecho para leer con detenimiento la canción y ensayar un poco.
Era temprano, se había levantado lo más temprano que lo normal, estaba nervioso, a medida que avanzaba un paso su corazón se aceleraba, estaba ansioso por ver a Yuma, en toda la noche no había podido olvidar aquellos ojos, aquella voz, Al entrar al estudio de grabación, vio a Yuma sentado en el sillón, las hojas de papel cubrían su rostro.
Al escuchar que alguien entraba, hizo las hojas a un lado para ver de quien se trataba, era Chinen, el cuál lo observaba tímidamente.
Al ver que Yuma lo observaba, trato de inmediato actuar lo más natural posible, acercándose a el y saludándolo con naturalidad.
-Yuma-kun! Llegaste temprano, buenos días-
AL ver a Chinen aproximarse a el, su corazón comenzó a latir con fuerza, no comprendía por que su cuerpo reaccionaba de esta manera, al ver al sonriente chico saludarlo con naturalidad, intentó hacer lo mismo.
-Buenos días Chinen-kun, tu también has llegado temprano- Dijo sonriente mientras observaba a Chinen fijamente a los ojos.
Al sentir la penetrante mirada de Yuma, inexplicablemente todo su cuerpo comenzó a temblar por dentro, era la primera vez que experimentaba algo asì, simplemente no comprendía lo que le estaba sucediendo, sentía que si su corazón seguía latiendo así de rápido Yuma podría darse cuenta.
Sin embargo, Yuma no tenía idea de lo que ocurría con Chinen, y es que el sentía exactamente lo mismo en aquellos momentos.
De repente, el silencio los invadió, más sin embargo aquel silencio no fue incomodo como normalmente le silencio lo es, ambos seguían viéndose fijamente a los ojos, como si trataran de comunicarse con tan solo mirarse, después de unos instantes Yuma pudo al fin comprender lo que le estaba ocurriendo, se había enamorado de Chinen, era algo que ni el mismo podía evitar a estas alturas, a decir verdad, estaba enamorado desde el primer día en que se conocieron años atrás, pero ahora, cuándo el estaba tan cambiado físicamente, era más atractivo, pero seguía conservando aquella alma alegre, aquella sonrisa y esa sinceridad que lo habían atrapado desde aquel entonces.
Sin pensar bien en lo que hacia, lentamente comenzó a acercarse a Chinen, este al notar que Yuma se acercaba lentamente a el, su corazón comenzó a salirse de control, la mirada fija de èl estaba cada vez mas cerca de su rostro, sin duda algo sucedería, así que sin pensarlo más, Chinen comenzó a cerrar poco a poco sus ojos, no sabía muy bien porque lo hacia, simplemente actuaba sin pensar.
AL ver que Chinen comenzaba a cerrar sus ojos y también a acercarse a el, sus labios buscaron tímidamente los de Chinen hasta encontrarlos, sorprendentemente, el chico correspondió a aquel dulce acercamiento sin objeción alguna, era como si Chinen también estuviese deseando aquel beso.
AL separarse un poco, ambos se observaban fijamente a los ojos, como si todo lo que deseaban decirse pudiese ser transmitido por medio de su mirada.
-Chinen-kun… yo…- Dijo Yuma tímidamente, Chinen lo observo fijamente, deseaba escuchar la voz de Yuma más que nada.
Pero justo en el momento, Yamada entro en el estudio, al ver a Yuma y a Chinen tan juntos se sorprendió bastante.
-Bu… buenos días…- Dijo tímidamente, ambos chicos al escuchar la voz de Yamada se separaron rápidamente.
-¿Ocurre algo? ¿Me perdí de algo importante?- Pregunto Yamada al ver la nerviosa reacción de los chicos, al notar esto Chinen se puso de pie rápidamente junto a Yamada y lo abrazo.
-No es nada Yama-chan, Yuma-kun y yo solo estábamos… conversando… no es nada en especial… ¿Cierto?- Dijo Chinen dirigiendo esta pregunta a Yuma.
-Si… si es verdad Yamada-kun- Fue lo único que podía decir, aún estaba aturdido por lo que había sucedido que ni siquiera estaba seguro de poder cantar.

Los ensayos terminaron, no lograron grabar ya que aún les faltaba mas acoplamiento, más sin embargo los comentarios del director eran un poco alentadores al decir que la voz de Chinen mejoraba poco a poco, esto puso al chico de buen humor y salió sonriente del estudio.
-Me iré primero, nos veremos mañana- Se despidió sonriente Yamada de los demás chicos, pero antes de irse se aproximo a Chinen para susurrarle al oído.
-¿Esta bien que te quedes solo con Yuma?-
Aquella pregunta provocó que el rostro de Chinen se sonrojara por completo.
-¿Por qué la pregunta?- Dijo de forma nerviosa tratando de sonar tranquilo, lo cuál no dio resultado.
-Por nada- Respondió Yamada tranquilamente mientras se alejaba de Chinen con una enorme sonrisa en su rostro.
-¿Ocurre algo?- Preguntó Yuma al ver la expresión atónita de Chinen.
Este se sorprendió bastante al ver que Yuma estaba de nuevo demasiado cerca de su rostro.
-No… no es nada- Dijo, después se alejo sin decir nada más.
Esto a Yuma no le pareció, comenzaba a sospechar que algo sucedía entre Yamada y Chinen y obviamente no planeaba quedarse con la duda, así que con paso veloz alcanzó a Chinen y con un poco de brusquedad lo jalo del brazo girándolo para verlo a la cara.
-Quiero hablar contigo- Dijo seriamente, Chinen no comprendía el cambio de actitud tan brusco de Yuma, y sin que le diera oportunidad de decir algo, Yuma lo pego contra la pared y lo miro fijamente a los ojos.
-¿Por qué me evitas?-
-¿Eh? ¿Evitarte?-
-En todo el transcurso del día no me has querido dirigir la palabra, evitas mis miradas, te refugias en Yamada cada que puedes-
Aquellas palabras hicieron que Chinen recordara lo transcurrido en aquel día, y es que después de ese beso entre el y Yuma, algo dentro de el no andaba bien, estaba confundido y a la vez se sentía feliz por aquel hecho, pero cada vez que su mirada se cruzaba con la de Yuma la desviaba rápidamente y se ponía a platicar demasiado cerca con Yamada, cada que Yuma se acercaba para hablar con el se iba de inmediato a refugiarse de nueva cuenta en su amigo Yamada, este al notar el extraño comportamiento de su pequeño amigo le pregunto.
-“¿Qué es lo que te pasa? ¿Acaso Yuma te desagrada? ¿Te hizo algo?”-
Chinen un poco nervioso, le contó a Yamada lo ocurrido, pero sin darse cuenta que Yuma lo observaba desde lejos como platicaban tan juntos.
Después de recordar, Chinen se dio cuenta de que su actitud no había sido la más correcta, pero antes de que pudiera responderla algo a Yuma, este volvió a hablar con menos dureza.
-¿Tanto de desagrado?- Al decir estas palabras, la dura mirada de Yuma se desvaneció por completo, al mismo tiempo que daba un paso hacia atrás para alejarse de Chinen.
Este al ver como Yuma bajaba la mirada, sintió como algo le oprimía el pecho, deseaba decirle a Yuma que eso no era verdad, pero simplemente las palabras no lograban salir de su boca.
Al no recibir respuesta alguna, Yuma fingió una sonrisa y le dijo a Chinen.
-Perdóname por quererte tanto…-
Dicho esto, Yuma se dio media vuelta y se alejó.
Al ver a Yuma alejarse lentamente, un dolor le oprimió el pecho, no deseaba que las cosas terminaran así sin haber comenzado aún, y antes de que Yuma desapareciera por completo del pasillo cruzando la puerta, Chinen reaccionó, sabía lo que quería expresar ahora y no lo perdería por nada, así que cerro su puño con decisión y corrió para alcanzar a Yuma.
Antes de abrir la puerta, pudo sentir un fuerte impacto por la espalda, alguien lo abrazaba con fuerza.
Podía sentir las manos de Chinen aferrarse a su pecho y su rostro recargado en su espalda.
-Yuma-kun yo… yo no…-
No podía decirlo, nunca había tenido que decir estas palabras, así que encontró otra forma de expresarlo, con movimientos agiles hizo que Yuma se girara, tiernamente lo jaló del cuello de su camisa y lo beso tiernamente en los labios.
Yuma no podía creer lo que estaba sucediendo, primero se quedó inmóvil, pero mientras su mente analizaba lo que estaba sucediendo, su cuerpo reaccionaba más rápido y respondió a aquel beso.
Al separarse, Chinen miraba a Yuma a los ojos, entonces se armo de valor, tenía que decirlo.
-Te necesito más de lo que te puedes imaginar Yuma-kun, no quiero que todo esto se termine sin siquiera haber comenzado-
Una sonrisa se dibujo en el rostro de Chinen, al escuchar estas palabras Yuma abrazó a Chinen rodeando su cintura con sus brazos acercándolo más a el, entonces le susurro al oído.
-Te he amado desde el primer día en que te conocí, y ahora no pienso dejarte ir-
Ruborizado pero con una sonrisa, Chinen le susurro al oído a Yuma.
-Me alegra escucharlo, por que yo tampoco pienso dejarte ir-
Después Yuma se acercó tiernamente al rostro de Chinen y lo beso tiernamente.
Ambos se habían dado cuenta que desde el primer momento en que volvieron a verse, ese sentimiento se había fortalecido, ya que ellos se amaron desde el primer día en que se habían conocido, solo que en ese entonces no eran lo suficientemente maduros para aceptarlo, ahora era diferente y ambos estaban listos para aceptarse mutuamente.

FIN

martes, 10 de noviembre de 2009

Helpless Night [Cap.13]

Capitulo 13

Mientras Kei se terminaba de bañar, Ryutaro permaneció inmóvil sobre la cama, no dejaba de pensar en lo que acababa de concluir, trato de pensar en muchas otras cosas, e incluso llego a pensar que estaria mejor si volviera a casa, lo cuál no podía hacer ya que por primera vez se había mostrado agresivo con su madre y con su hermano y había salido furioso de la casa, la razon, pues no era una en especial, simplemente se encontraba de mal humor y termino desquitandose con su madre y hermano.
Además, sabía que si decidia marcharse, Kei no lo tomaría muy bien, incapaz de pensar en otra cosa, suspiro profundo.

Al salir del baño, pudo escuchar como Ryutaro suspiraba, entró en la habitación y con una toalla enredada en la cintura y con otra secandose el cabello se acerco hacia donde Ryutaro estaba sentado.
-¿Que ocurre? ¿A que se debe ese supiro?-
Pregunto curioso, Ryutaro sin levantar la mirada respondió.
-No es nada...-
-¿Seguro?-
-Si...-
Y en ese momento, cuando Ryutaro levantó la mirada para ver a Kei, se llevo una gran sorpresa al verlo practicamente semidesnudo justo frente a el, de inmediato sus mejillas se ruborizaron, al notar esto, Kei acerco su rostro al del avergonzado Ryutaro, este al sentir que Kei se acercaba a su rostro lo unico que hizo fue cerrar los ojos.
Ryutaro imaginó que Kei lo besaría, pero después de unos segundos no fue asi, Kei solo se habia acercado para colocar su mano sobre la frente de Ryutaro.
-Mmm... no tienes fiebre... pero si estas rojo como un jitomate...-
-Ah! ¡Olvidalo! ¡Estoy bien!-
Gritó Ryutaro más avergonzado aún por pensar que Kei lo besaría, rápidamente alejo la mano de Kei de su rostro y se puso de pie.
-¿Que ocurre?-
Preguntó Kei, no entendía porque Ryutaro se comportaba de esa forma.
-No...no... no es nada, ¿por que no mejor te vistes primero?-
Dijo mientras le daba la espalda a Kei.
-Oh... creo que ya entendí...-
Dijo Kei con un tono de voz travieso mientras se acercaba sigilosamente hacia donde estaba Ryutaro de espaldas, y sin que este se diera cuenta, lo abrazo tiernamente.
-Me encanta ver cuándo te preocupas de esa forma, pero, no te preocupes, no haré nada que tu no quieras hacer-
Al terminar estas palabras, Kei besó tiernamente el cuello de Ryutaro, provocando que el menor se sonrojara por completo.
Después, Kei lo soltó y se fue al otro extremo de la habitación para comenzar a vestirse, todo ese tiempo Ryutaro permaneció de espaldas, estaba demasiado nervioso, aquel beso que Kei le habia dado en el cuello lo tenían muy feliz y a la vez nervioso, no sabía como actuar ante una situación así.

Al salir de aquel restaurante, Ryosuke y Yuto comenzaron a caminar, después el telefono de Ryosuke comenzo a sonar, al ver quien llamaba respondió rápidamente.
-Chinen-kun ¿Que ocurre?-
-¿Recibiste mi mensaje?-
-Si... ¿Te iras mañana cierto?-
-Así es, ¿Si irás mañana a despedirme verdad?-
-No lo se, tengo clases mañana...-
-Mi vuelo sale a medio día, ¿Crees poder estar ahi?-
-No lo se...-
Yuto observaba la expresión de Ryosuke mientras hablaba por telefono, estaba indeciso y a la vez preocupado por algo.
-Vamos Yama-chan! No se cuándo volveré de nuevo y quiero hablar contigo-
-¿Hablar?-
-Promete que iras ¿de acuerdo?-
-De acuerdo, tratare de llegar a tiempo-
Despues de unas cuantas palabras más, Ryosuke terminó con aquella llamada y guardo su movil de nuevo en su bolsillo, dejando salir un gran suspiro.
-¿Ocurre algo con Chinen-kun?-
Preguntó Yuto, recordaba muy bien al pequeño Chinen y sabía que era buen amigo de Ryosuke.
-Mañana regresara al extranjero a seguir con sus estudios...-
-¿Iras a despedirlo?-
Al preguntar esto, Yuto observó como la melancolía invadía el rostro de Ryosuke.
-¿Ocurre algo?-
Preguntó Yuto preocuopado, este se quedó en silencio con la miarada desviada.
-Si quieres... te acompañare mañana...-
Al escuchar esto, Ryosuke miró timidamente a Yuto, como si tuviese miedo de verlo a los ojos.
-Esta bien Yuto, mañana tenemos clases y no debes faltar por mi, estaré bien-
Dijo tratando de finjir una sonrisa.
-¿Estas bien?-
Ryosuke desvio la mirada, al notar esto Yuto supo de inmediato que algo no estaba bien, deseaba saber que era lo que sucedía con Ryosuke así que intento preguntar.
-¿Acaso no quieres ir a despedir a Chinen-kun?-
-¿Eh?-
Yuto tenia algo de razon en aquella pregunta, sabía que si iba a despedir a Chinen, esa persona también estaría ahí.
Al ver la preocupada mirada de Ryosuke, se acercó un poco a el y con voz serena le dijo.
-No olvides el trato que acabamos de hacer, prometimos saberlo todo el uno del otro, espero y cumplas con esa promesa Yamada-kun-
Ryosuke levantó timidamente la mirada, al encontrarse con la profunda mirada de Yuto no pudo evitar el sonreir levemente.
-No te preocupes, estare bien, mañana ire a despedir a Chinen-
-¿Seguro que no quieres que te acompañe?-
-Seguro, estare bien-
Dijo, y despues volvio a sonreir, Yuto observó fijamente a Ryosuke, esas palabras y aquella sonrisa no lo convencian por completo, mas sin embargo si Ryosuke no queria decir nada mas, no podía obligarlo, sabía que tarde o temprano el le diría lo que realmente le preocupaba.
Al llegar a la mitad del camino Ryosuke se detuvo.
-Pues aqui nos separamos, nos veremos mañana ¿de acuerdo?-
-Esta bien, nos veremos mañana-
Después, con una sonrisa fingida, Ryosuke se despidió de Yuto, sin decir nada mas, se alejo y se perdio entre la gente, Yuto solo observo como Ryosuke se alejaba, no queria presionarlo, así que esperaria a que Ryosuke quisiera decirle lo que le preocupaba.

Cuando Kei termino de vestirse, comenzó a acomodar la cama, despues abrió el armario y sacó un futon y una cobija, lo acomodo en el suelo a un lado de la cama, al terminar, noto que Ryutaro aun seguia de espaldas, y es que estaba tan absorto en sus pensamientos, que no se daba cuenta de que Kei llevaba rato llamandolo.
-Ryutaro!-
Al reaccionar se encontro con el rostro de Kei de nuevo muy cerca del suyo.
-Ya esta listo, acomodate en la cama-
Dijo mientras lo tomaba de la mano y lo llevaba hacia donde estaba la cama, Ryutaro no habia visto el futon que se encontraba a un lado de la cama, Kei lo sentó sobre la cama.
-¿Traes algo que ponerte o quieres que te preste algo?-
-Ah... traje en mi mochila mi.... pijama iré por ella-
Nervioso, Ryutaro se puso de pie y salio de la habitación para dirigirse al comedor, en donde había dejado su mochila, al entrar, esperaba encontrar a Kei en la cama esperandolo, pero no fue así, miro por todas partes pero Kei no estaba a la vista.
Al acercarse timidamente a la cama, observó que Kei estaba recostado del otro extremo de la cama sobre un futon en el suelo.
Esto dejo muy sorprendido a Ryutaro, no sabía que hacer o que decir, sin darse cuenta, al ver a Kei dormido sobre aquel futon en el suelo, se sintió un poco desepcionado, y es que en el fondo deseaba dormir al lado de Inoo.
Cuando terminó de vestirse, se acomodo en la cama de Kei, al cubrirse con las cobijas pudo persivir de inmediato la escencia de Kei, era tan agradable su aroma.
Al sentir que Ryutaro ya estaba acostado, se puso de pie y apago la luz, después se acerco a la cama, lentamente se acerco al oido del menor y con una dulce voz le susurro.
-Buenas noches-
Despues se alejo y se volvio a recostar sobre aquel futon.
Ryutaro no pudo responder, Kei siempre lo ponia demasiado nervioso.

Los minutos transcurrieron y Ryutaro no lograba conciliar el sueño, sabía que estaba con Kei en la misma habitación, pero eso no era suficiente para el.
Lentamente se reincorporo y se sento sobre la cama, se asomo hacia donde se encontraba Kei, estaba completamente dormido, aprovechando la situación, cuidadosamente jalo una de las cobijas de la cama y la coloco lentamente a un lado de Kei, despues, sigilosamente bajo de la cama y se recostó a un lado de Kei.
Estaba muy avergonzado por lo impulsivo que estaba siendo, pero desde que decidio acepatar sus sentimientos con Kei dejo de actuar como siempre lo hacia.
Al sentir cuando Ryutaro se recosto a su lado, se giro para abrazarlo tiernamente, pudo sentir como Ryutaro se sorprendía ante tal acto, pero poco a poco termino por aceptar aquel abrazo y el menor se acurruco tiernamente en el pecho de Kei, quedandose así ambos, profundamente dormidos, despues Ryutaro pudo sentir como Kei besaba tiernamente su frente, provocando que se ruborizara un poco.
-Descuida, te lo dije antes, no hare nada que tu no quieras-
Le susurro Kei al oido, al escuchar esto, Ryutaro levando su cabeza para besar a Kei, el cuál no se esperaba tal acto, cuándo Ryutaro se separó de el lo miro fijamente a los ojos.
-¿Y acaso sabes que es lo que quiero?-
Pregunto, Kei jamas habia visto a Ryutaro de esa forma, aunque el menor era mucho mas maduro y frio que el, era la primera vez que lo notaba tan decidido.
-Si pudiera saberlo, no tendría tanto miedo de lastimarte-
Respondió Kei con suavidad.
-No tienes por que lastimarme-
Y antes de que Kei pudiera decir otra cosa, sus labios quedaron completamente sellados por los de Ryutaro, aquella iniciativa que estaba tomando era extraña incluso para el mismo, pero eso ya no importaba ahora.

Lentamente, aquel beso se fue profundisando cada vez más entre los dos, provocandose mutuamente con dulces carisias, lentamente, Kei comenzo a besar el cuello de Ryutaro mientras desabotonaba lentamente la camisa de su pijama.
Instantes después, ambos se encontraban completamente desnudos debajo de las cobijas, Kei exploraba con sus labios cada parte del cuerpo de Ryutaro, el cuál no podía evitar el soltar leves gemidos de placer al sentir los labios de Kei sobre cada parte de su cuerpo.
Tras haber saboreado cada parte del cuerpo de Ryutaro, lentamente regreso para besarlo apasionadamente mientras su mano acariciaba su ya excitado miembro, Kei trataba de opacar los gemidos de Ryutaro con apasionados besos, pero cuando comenzo a penetrar su entrada con sus dedos, Ryutaro comenzo a gemir con mayor fuerza, aquello era realmente doloroso.
Mientras Kei preparaba la entrada de Ryutaro con sus dedos, no dejaba de besar lentamente su cuello, en cuánto sintío que el cuerpo de Ryutaro no estaba tan tenso y aquellos gritos de dolor comenzaban a convertirse en gemidos de placer, Kei separo un poco más las piernas de Ryutaro para después acercar delicadamente su miembro y comenzar a penetrarlo suavemente.
Al sentir a Kei dentro de el, primero experimento un dolo que jamas habia sentido, tratando de reprimir los gemidos, se aferro con fuerza a la espalda de Kei, mientras el ritmo avanzaba, Ryutaro se acostumbraba rapidamente a aquel dolor, que despues se convirtio en un delicioso placer, después con sus piernas rodeo la cintura de Kei, juntandolo mas a su cuerpo.
Kei comenzo a acelerar el ritmo, Ryutaro podia sentir la agitada respiración de Kei sobre su cuello, mientras que Ryutaro se aferraba cada vez mas al cuerpo de Kei.
El ritmo de ambos estaba completamente acelerado y el momento del placer para ambos no se hizo esperar, Kei llego al punto maximo y Ryutaro pudo sentir como el liquido de Kei se regaba en su interior, era un sentimiento delicioso y unico.
Lentamente y con cuidado, Kei salio del interior de Ryutaro, su intensión era recostarse a su lado, pero Ryutaro no se lo permitio, aun lo abrazaba con fuerza, lo miro directo a los ojos y lentamente ambos se besaron de nuevo.
Completamente agotado, Kei se recosto a un lado de Ryutaro, el cual se giro de inmediato para acurrucarse en los brazos de Kei, este lo acepto cariñosamente y ambos se quedaron profundamente dormidos.
Aquella noche había sido unica para ambos chicos, sin necesidad de expresarlo con palabras, sus cuerpos se habian dicho todo el amor que se tenían y lo mucho que se necesitaban.

A la mañana siguiente, Ryosuke despertó temprano, se alisto para ir a la escuela, tomo su desayuno y salió de casa, hoy sería el día que Chinen se iría de nuevo, se había comprometido a estar con el para despedirlo, pero sabía que esa persona también estaría alli.
-"No huire más de ti... Takaki Yuya"-
Se dijo a sí mismo mientras caminaba rumbo a la escuela, se saldria una hora antes para llegar a tiempo y despedir a Chinen, y afrontar a Takaki si era necesario.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Helpless Night [Cap.12]

Capitulo 12

Habían transcurrido las horas, el día había pasado casi por completo, lentamente Yuto abrió los ojos, al ver que aún Ryosuke seguía a su lado lo lleno de un sentimiento sumamente calido.

-Yamada-kun...-
Susurro Yuto en voz baja, con voz amable moviento un poco al dormido Ryosuke, este se despertó con dificultad, le costaba trabajo lograr abrir los ojos por completo, pero al ver que Yuto se ponía de pie, se mevió rápidamente y rodeo su cintura con sus brazos.
-¿Que sucede?-
Ante este acto Yuto no sabía como reaccionar así que de inmediato su rostro se puso un poco sonrojado y con voz timida contestó.
-Bueno, es que, ya es un poco tarde, además...-
En ese momento su estomago emitió un extraño sonido, estaba hambriento.
-Entiendo-
Dijo Ryosuke con una enorme sonrisa mientras dejaba libre a Yuto.
-¿Que acaso tu no tienes hambre?-
-Bueno, a decir verdad si tengo un poco-
-Bien, veré que puedo hacer-
-Espera-
Dijo Yamada rapidamente al ver que Yuto se disponía ponerse de pie.
-Tengo una buena opción-
-¿Eh? ¿A que te refieres con opción?-
-Solo espera... ah... ¿Puedo usar tu baño?-
Yuto no comprendia del todo lo que pensaba Ryosuke, pero aún asi, con un rostro que expresaba un poco de desconcierto, le respondió.
-Adelante...-
-Gracias-
En ese momento Ryosuke recogio su ropa del piso y entro al baño, Yuto no lograba comprender que tramaba.
A los pocos segundos de haber entrado al baño, se dió cuenta de que no sabía cuál era la llave del agua caliente, así que abrió la puerta del baño, asomo solo la mitad de su cuerpo y le grito a Yuto, el cuál ya estaba casi vestido.
-Disculpa pero... ¿Cuál es la llave del agua caliente?-
-¿Eh?... Pues... la llave de la izquierda, la que esta pegada a la pared...-
-Gracias-
Dicho esto, entro de nuevo al baño, segundos después pudo escuchar el sonido del agua callendo.
Antes de terminar de vestirse, Yuto pensó que sería buena idea tomar un baño también, pero tendría que esperar a que Ryosuke saliera primero.
-"Tengo que esperarlo, no puedo entrar asi como asi.... aunque.... bueno... estoy en mi casa... es mi baño.... además.... ademas nosotros... bueno... no debe haber ningun inconveniente si yo... ¡Ah! ¡Imposible!"-
Pensaba Yuto, su dilema de si entraba o no a bañarse junto s Ryosuke lo atormentaba bastante, y mientras estaba discutiendo en su interior si era o no buena idea entrar, Ryosuke salió del baño.
-Listo, muchas gracias Yuto, creo que ahora es tu turno.... ¿Eh? ¿Te ocurre algo?-
Yuto no se había dado cuenta de que Ryosuke ya había salido del baño, por lo que su lucha interior continuaba, y con ella diferentes expresiones aparecian en su rostro.
-Yuto... Yuto... ¡Yuto!-
Al escuchar la voz de Ryosuke, regresó a la realidad de una forma un poco brusca.
-¿Eh? Ah! Yamada-kun... ¿En que momento tu...?-
-Deja de soñar despierto y entra! Es tu turno! No quiero que se haga más tarde-
-Ah... bien... si, voy, saldre en un segundo-
Dijo mientras entraba al baño con su camisa en las manos, cuándo hubo cerrado la puerta, Ryosuke sonrió y mientras esperaba a Yuto se secaba el cabello con una pequeña toalla que había tomado del baño.

Aquel tierno beso lo había dejado sin aliento, mientras caminaba de regreso a casa en la única persona en la que podía pensar era en Inoo.
Al mismo tiempo, mientras entraba en su habitación, la sensación de haber tenido a Ryutaro entre sus brazos no desaarecía, no lograba permanecer tranquilo, intento ponerse a trabajar en algunos proyectos escolares que tenía pendientes, pero era imposible, de alguna forma se había vuelto adicto a Ryutaro y comenzaba a necesitar estar con él más de lo que el pensaba.
No podía sseguir pensando así, en estos momentos Ryutaro ya se encontraba en su casa, asi que frotandose la cara fuertemente, se puso de pie, salió de su habitación y se dirigio hacia la pequeña cocina, que mejor remedio para intentar hacer otra cosa que comer algo delicioso.
Mientras se preparaba un poco de ramen, trataba de concentrarse plenamente en lo que hacia, haciendo por escasos momentos a Ryutaro a un lado, después de todo la comida era su segundo amor.
Pero algo extraño sucedió, mientras estaba completamente concentrado en su ramen, a punto de terminar la preparacion de lo que el concideraba su obra maestra, alguien tocaba la puerta.
-"¿Quien diablos podrá ser?"-
Pensó un poco malhumorado mientras le bajaba un poco a la flama de la estufa y se dirigia a abrir la puerta.
Al abrir la puerta se llevo la sorpresa de su vida.
-Ryutaro... ¿Que ocurre?-
Ryutaro con las mejillas levemente ruborizadas y desviando la mirada respondió.
-¿Puedo pasar?-
Kei estaba sorprendido y a la vez emocionado por ver a Ryutaro más pronto de lo que el hubiera imaginado.
-Adelante-
Dijo Kei haciendose a un lado para dejar que Ryutaro entrara.
Timidamente, Ryutaro entro al departamento de Kei, era casi como se lo imaginaba, un departamento digno de alguien tan extraño como él.
-Ah... ¿tienes hambre?-
-¿Eh?-
-Bueno, es que has llegado en el momento justo de la cena, asi que toma asiento, servire un poco de ramen, espero que te guste-
Sin siquiera esperar una respuesta por parte del menor, Kei se dirigió a la cocina, acomodo de prisa la mesa y llevo un par de jugos.
Ryutaro se acerco timidamente a la mesa, tomo asiento en una silla y observó como Kei servía en un plato un poco de ramen.
Al llegar con ambos platos, Kei le dio un par de palillos a Ryutaro.
-Tienes suerte, normalmente me preparo dos o tres porciones, nunca se sabe cuándo te pueda volver a dar hambre-
-¿dos o tres porciones... extra?-
-Bien, espero que te guste, Itadakimasu~ -
-Itadakimasu...-
Dijo timidamente Ryutaro, al comenzar a comer, no pudo evitar el poner una feliz expresión en su rostro, aquel ramen estaba realmente delicioso, a lo que Kei solo respondio con una sonrisa mientras tragaba un bocado enorme de fideos.

Cuando llego a su ahora solitario departamento, se quito su abrigo y lo aventó hacia el sillón, se dirigió a su habitación y se recostó sobre su cama boca arriba, reflexionaba lo que Chinen le había pedido.
-"¿Y como pretende que hable con él? Lo más seguro es que primero me de un golpe y después se vaya"-
Pensó Takaki, se sentía frustrado, no solo debía afrontar el hecho de que Chinen se iria, si no que tendría que cumplir con la promesa de hablar con Ryosuke, no estaba muy seguro de poder hacerlo, mas sin embargo era un hombre de palabra y estaba dispuesto a intentar hablar con el en la prrimera oportunidad que se le presentara.
Ya un poco más tranquilo, se puso de pie de un brinco y se dirigió a la cocina para comer algo antes de irse a dormir.

-¿A dónde pretendes que vayamos Yamada-kun?
Dijo Yuto mientras caminaba junto a Ryosuke.
-Iremos a comer algo, eso es todo-
-¿A dónde?-
-A un lugar que visité esta mañana-
-¿Ha?-
-Deja de hacer preguntas y date prisa, muero de hambre-
Dijo Ryosuke con una enorme sonrisa mientras aceleraba el paso.
-Hey! ¡Espera!-
Grito Yuto mientras corría para alcanzar a Ryosuke.
Cuándo llegaron a aquella cafeteria, Ryosuke llevó a Yuto hacia una de las mesas más escondidas, instantes después apareció una de las meseras y ambos pidieron algo de cenar.
-¿Como sabes de este lugar?-
Preguntó Yuto extrañado.
-Pues... digamos que tuve que venir aqui esta mañana antes de pasar a tu casa y se me ocurrió que este lugar esta perfecto para cenar algo-
-¿Seguro que es solo eso?-
Ryosuke algo extrañado miró a Yuto.
-¿Por qué? ¿Pasa algo?-
-Bueno es que... este lugar es uno de mis preferidos, por eso me sorprendió que me trajeras a este lugar...-
-Oh...-
Ryosuke comprendía ahora, obviamente Keito también sabía que ese lugar era el favorito de Yuto, sin darse cuenta, comenzó a molestarse y esto se vió reflejado en su rostro.
-¿Pasa algo?-
Preguntó Yuto al ver la enojada expresión de Ryosuke.
-No, no es nada...-
-¿Keito de dijo de este lugar?-
-¿Eh?... ¿Como...-
-Ya te lo dije antes, Keito para mi es solo un muy buen amigo, el hecho de que el sepa de mis lugares preferidos es por que lo conosco desde hace mucho más tiempo de lo que te conosco a ti-
-Pues entonces quiero cambiar eso-
Interrumpió Ryosuke a Yuto.
-¿Eh?-
-Si, de ahora en adelante quiero saberlo todo de ti, todo, no quiero que exista algo que yo no sepa de ti Yuto-
-Pues... de mi no hay mucho que puedas saber, soy una persona muy simple supongo-
-Pues entonces quiero conocer cada parte simple que tengas-
Yuto sonrió timidamente al escuchar estas palabras, sabía que el haber elegido a Ryosuke era una buena decisión.
-Esta bien, lo conoceras todo, o lo poco que tenga, pero... yo también pido lo mismo, quiero saberlo todo de ti-
-Hecho-
Dijo Ryosuke con una amplia sonrisa, ambos se sonrieron, minutos después la comida llego y comenzaron a comer mientras platicaban un poco.

Cuando ambos hubieron terminado de comer, Kei comenzo a limpiar la mesa, Ryutaro quería ayudar pero Kei no lo dejó, asi que solo se quedo observando como este limpiaba.
Cuándo termino lo invitó a entrar a su habitación, Ryutaro aceptó y entró detras de Kei.
Kei tomo asiento en la silla de su escritorio mientras que Ryutaro se sentó en la cama.
-¿Y que pasa? Crei que no nos veriamos hasta mañana-
Preguntó Kei.
-Bueno lo que pasa es que... quiero quedarme aqui... esta noche... espero que no te moleste-
Al escuchar esto Inoo se sonrojó levemente, pero con una enorme sonrisa le respondió Ryutaro.
-No hay problema, eres bienvenido-
-Gracias-
Dijo Ryutaro timidamente, al verlo Inoo se puso de pie y abrazó a Ryutaro, el cuál aun permanecia sentado.
-Me siento tan bien de que estes aqui, creo que si tu n hubieses venido yo hubiera ido a tu casa para quedarme a tu lado-
-Estas loco...-
Fue lo unico que dijo Ryutaro en un tono de voz serio tratando de ocultar su timidez.
-Bien, ya que no hay nada más que hacer, tomaré un baño, tu puedes ir haciendo lo que quieras-
-Esta bien-
Dicho esto, Inoo se alejó de Ryutaro y cuándo este se fue, Ryutaro se quedo inmovil sentado en la cama.
Observó a su alrededor y aquella habitación era realmente pequeña.
-"Aqui no hay espacio... significa que... ¿Dormiremos juntos?"

lunes, 2 de noviembre de 2009

Helpless Night [Cap.11]

Capitulo 11

Aquella situación en la que Ryosuke y Yuto se encontraban no parecía tener fin, al contrario, aquel beso se volvía cada vez más profundo.

-Yuto comenzaba a sentirse diferente, era la primera vez que experimentaba algo así, al mismo tiempo Ryosuke se sentía de la misma manera, el tener los labios de Yuto sobre los suyos era algo que de cierta forma comenzaba a convertirse en algo adictivo para el.

Poco a poco la temperatura subia, llego el punto en que los besos no fueron suficientes para Ryosuke, y de una forma instintiva deslizó su mano por debajo de la camisa de Yuto y suavemente comenzó a acariciar su pecho, provocando en Yuto cierto sentimiento de excitación por todo su cuerpo, y es que el roce de las manos de Ryosuke por su pecho desnudo eran delicados pero al mismo tiempo excitantes.

Después de unos minutos de áquel beso tan intenso, ambos terminaron con aquel beso, pero sin desperdiciar ni un segundo, con una iniciariva que hata el mismo desconocía, lentamente comenzó a besar el cuello de Ryosuke, este disfrutaba de aquellos besos y lentamente su cuerpo se excitaba.

Mientras deboraba lenta y deliciosamente el cuello de Ryosuke, lentamente le quito la playera a Ryosuke, dejando ver su desnudo torso, este sintiendose avergonzado, de una forma provocativa y con una mirada seductora se acerco a Yuto, al cuál lo besó apasionadamente en los labios al mismo tiempo que tambien lo despojaba de su playera.

Ambos, semidesnudos, seguian devorandose a besos, mientras lo hacían, Yuto abrazó a Ryosuke por la cintura, al mismo tiempo que lo recostaba lentamente en el piso, al quedar Yuto sobre Ryosuke, decidió volver a besar el cuello de Ryosuke, instantes despues se encontraba besando tiernamente su desnudo pecho mientras que lentamente acercaba su mano hacia su pantalon para desabrocharlo, y lentamente despojarlo de este junto con su ropa interior, al tener a Ryosuke completamente desnudo debajo de él, volvió a besarlo en los labios para rápidamente despojarse tambien de su pantalon y ropa interior.

Completamente desnudos, ambos comenzaron a llenarse de besos y caricias por todo el cuerpo, comenzaron a explorar lugares desconocidos para ambos, en cada beso y en cada caricia había un sentimiento tan profundo, que ambos jamás habían conocido hasta aquel momento.

Mientras Yuto acariciaba y besaba el pecho de Ryosuke, bajo su mano para acariciar con suevidad el miembro del pequeño, el cuál no dejaba de soltar lebes gemidos, el sentir la cálida mano de Yuto sobre su miembro y los suaves labios de este sobre su cuerpo era un sentimiento tan placentero que no podía evitar gemir placer.

En cuanto sintió que el momento en que se correría llegaba, tomo a Yuto con un poco de brusquedad y lo besó apasionadamente en los labios, miemtras que se corría en la mano del alto.

Después Yuto sabía lo que debía continuar, aunque jamás habia tenido relaciones con alguien, esto resultaba de cierta forma natural, ninguno de los dos tenian alguna clase de experiencia por lo que era doblemente placentero para ambos.
Así que al predecir el siguiente movimiento, Ryosuke abrió levemente sus piernas, al ver esto, Yuto, con sus dedos completamente humedos por el liquido de Ryosuke, comenzó a introducir uno de sus dedos por la entrada de Ryosuke, este al sentir el dedo de Yuto comenzó a sentir dolor, por lo que no pudo evitar en dejar salir un gran gemido de dolor, que poco a poco se convertía en un gemido de placer.

Al intuir que Ryosuke se encontraba listo para recibirlo, se preparo para entrar en el, pero antes de hacerlo, volvió a acercar su rostro al del pequeño, ambos se miraron fijamente a los ojos, y sin que Ryosuke se lo esperara, Yuto se acerco a su oido y le susurro.
-Mis sentimientos ahora son claros, Yamada-kun yo...-
Pero antes de que continuara, Ryosuke lo interrumpió.
-Lo sé... Yuto... tu cuerpo me lo esta diciendo en estos momentos así que...-
Yuto tampoco permitio que Ryosuke terminara de hablar, asi que mirandolo fijamente a los ojos y con el rostro completamente ruborizado le dijo firmememte.
-Te amo-
Aquellas palabras provocaron en Ryosuke una enorme felicidad, pero antes de que pudiera decir o reaccionar de alguna manera, Yuto comenzo a entrar en el lentamente.

Al sentir a Yuto dentro de él, hubo un poco de dolor, pero poco a poco su cuerpo se acostumbraba a aquella sensasión, y en lugar de aquel dolor el placer comenzaba a apoderarse de el.
Aún con aquellas dos pequeñas palabras dando vueltas por su cabeza, e incapaz de decir nada, sus ojos se llenaron de lagrimas, y mientras las embestidas de Yuto iban en aumento, las lagrimas de Ryosuke brotaban lentamente, eran lagrimas de felicidad.

En cada embestida, ambos experimentaban un placer inimaginable, y cuando el momento de Yuto llego, Ryosuke solo sintó como el liquido de Yuto se corría dentro de él.
Cansado, suavemente salió del interior de Ryosuke y se recosto a su lado, lo abrazó tiernamente, y antes de que pudieran quedarse dormidos Ryosuke hablo.
-Muchas gracias Yuto... Te amo-
Al escuchar esto, un enorme sentimiento de felicidad invadio todo su ser, en respuesta abrazo con toda la fuerza que le quedaba a Ryosuke, pegandolo fuertemente a su cuerpo, este di igual forma abrazaba a Yuto, insntantes después, ambos, abrazados y cansados, se quedaron dormidos, ninguno de los dos podían ocultar aquella sonrisa de sus labios mientras dormían, estaban satisfechos y completamente felices de estar abrazados a la persona que amaban, que aunque no tenian años,ni meses de conocerse, tan solo días, en ellos se había despertado aquel hermoso sentimeinto desde el primer instante en que sus miradas se cruzaron, y para ellos, eso era más que suficiente.

La tarde había pasado, el sol estaba a punto de ocultarse, lo que significaba que el día estaba a pocos instantes de terminar, y con él también se llevaría a Chinen de su lado.
Ambos habian disfrutado de una maravillosa tarde juntos, se habian divertido bastante, pero aunque lo habia prometido, Takaki no podía evitar el sentirse demasiado triste, este era el último día que pasaría con la persona que tanto amaba, era algo que definitivamente no podía soportar por mucho que entendiera las razones de Chinen.

Por otro lado, Chinen tampoco podía evitar el sentirse vacio, sabia que al irse no solo dejaba a Takaki, tambien a la persona que más amaba en este mundo.
-Takaki...-
Dijo Chinen deteniendose a la mitad del camino, Takaki se detuvo y se giro para ver a Chinen.
-Takaki yo... yo me voy para cumplir mi sueño y estudiar lo que mas amo, prometo que en cuanto vuelva sere un fotografo profesional y entonces... pero solo hasta ese entonces, estaremos juntos para siempre... pero mientras no estoy, quiero que me prometas algo...-
Takaki no dijo nada y siguio escuchando a Chinen con atención.
-Por favor, busca a Yamada, sé que aun te duele recordar aquellos días, y se que te duele más a ti que a mi, así que por favor, buscalo y arregla las cosas, estoy completamente seguro de que él te escuchara-

Ante esta petición, Takaki guardo silencio, bajo la mirada, estaba confundido, no estaba seguro de poder siquiera atreverse a acercaese a Ryosuke.
Al ver su rostro preocupado, Chinen se acerco a Takaki, y con sus manos, tiernamente tomo el rostro de Takaki y mirandolo fijamente a los ojos le dijo.
-Yo se lo dificil que debe ser para ti buscar a Yamada despues de lo que sucedió, pero el te escuchara y comprendera lo que hiciste, el esta cambiando, alguien lo esta cambiando y se que el te escuchara-

Las imagenes del pasado pasaron velozmente por la cabeza de Takaki, pero lo que más presente se mantenía era la imagen de Ryosuke observandolo con lagrimas en los ojos, al mismo tiempo que lo miraba con odio y le gritaba, esa imagen jamás desaparecería de su cabeza.
-Esta bien... lo hare... hablare con el-
-Gracias Takaki, ya veras que despues de hablar con el todo cambiara-
-Si tu lo dices...-
En ese momento la enorme sonrisa en el rostro de Chinen hicieron que Takaki también sonriera, pero aquella dulce atomosfera fue interrumpida por una melodia proveniente del movil de Chinen.

Mientras Chinen atendia aquella llamada, Takaki se giro, no queria que el pequeño notara su triste rostro, sabía que el momento de separarse cada vez esaba más cerca.
Al terminar aquella llamada, Chinen se acero a Takaki, y haciendolo girar para quedar frente a frente le dijo.
-Mi vuelo... saldra mañana a las 12 de día, te estare esperando en el aereopuerto, ¿vendras cierto?-
Con una sonrisa amraga, Takaki respondió.
-Ahi estare Yuri-
Después, ambos se besaron dulcemente, al terminar aquel beso, con la mirada triste, Chinen observó a Takaki.
-Debo irme ahora, mis padres me esperan en casa, nos veremos mañana ¿de acuedo?-
-De acuerdo-
Dijo Takaki.
-Hasta mañana-
Dijo Chinen con una tierna sonrisa, se dio media vuelta, y emprendio su camino de regreso a casa, Takaki solo se quedo ahi, de pie, obsevando como Chinen se perdia entre la gente, cuando lo perdio por completo de vista, y con un vacio en el pecho, emprendio el camino de regreso a casa.

Cuándo Ryosuke despertó, pudo darse cuenta que Yuto aún seguía a su lado, hecho ante el cual no pudo evitar el dejar salir una enorme sonrisa, se reincorporo lentamente para no despertar a Yuto, al ver su reloj se percato de que ya era bastante tarde y comenzaba a hacer frio, se puso su ropa interior y se dirigió a la habitacion de Yuto, de donde quito la cobija que cubria la cama de este y la llevo hacia donde estaba Yuto completamente dormido.

Aunque aún era temprano, no deseaba volver a casa, queria quedarse con Yuto, así que sacó su movil del bolsillo de su pantalon, pero al abrirlo se encontro con un mensaje de Chinen, al leerlo se quedo sorprendido, este mensaje decia:
"Yama-chan, partire de regreso mañana, me alegraria mucho verte en el aereopuerto para despedirnos, mi vuelo sale a las 12 del dia, te estare esperando"

-"Ya tan pronto se va... me hubiese gustado hablar más con el..."-
Pensó mientras salia del mensaje y comenzaba a llamar a casa, avisaba que no llegaria a casa y que no iria a la escuela, ante las insistentes preguntas de su madre, Ryosuke decidió terminar con la llamda.
Después, al dejar su movil sobre la mesita, se recostó de nuevo al lado de Yuto, y minutos después, volvió a qudarse dormido.