sábado, 31 de octubre de 2009

Helpless Night [Cap.10]

Capitulo 10

Yamada observaba desoncertado a Keito, no lograba comprender el por que de su extraño comentario, "un punto menos" ¿Que acaso lo estaba evaluando?

-Creo saber que es lo que sucede entre Yuto y tu, pero, ¿Tu sabes lo que pasa por la cabeza de Yuto? Por lo que logre ver anoche parece ser que no-
La voz de Keito era firme, Yamada no sabía que responder, Keito se dio cuenta de la reacción nerviosa de Yamadada, había dado en el clavo.
-Tengo que irme, pero antes, quiero advertirte algo-
Dijo Keito poniendose de pie.
-¿Me estas amenazando?-
Dijo Ryosuke tratando de controlar la rabia que ese comentario le había provocado.
-Mi intensión no es amenazarte ni mucho menos, solo que si le haces daño a Yuto, yo me encargaré de que jamás vuelvas a saber de él, ahora me retiro, hasta luego Yamada-kun-
Y así, Keito desapareció por la puerta de aquel restaurante.

Aquel comentario lo había dejado sin habla, ¿Por que Keito protegía tanto a Yuto?
Sin nada más que hacer en aquel lugar, se puso de pie y salió del lugar, estaba decidido a ir a ver a Yuto, necesitaba hablar con él y saber el tipo de relación que tenía con Keito.

Le costo mucho trabajo conciliar el sueño la noche anterior, así que por lógica se levanto algo tarde.
Al salir de su habitación para ver si Keito también estaba despierto, se encontro un pequeño papel sobre la mesa, el cuál decía.
"Me tuve que ir más temprano, te agradesco por dejar que me quedara, como agradecimiento te he dejado el desayuno listo, todo esta en la cocina.
Keito.
P.D: Yo siempre estare a tu lado para cuidarte, sabes que puedes hablar conmigo de lo que sea."

Una sonrisa se dibujó en el rostro de Yuto, de verdad que Keito era su mejor amigo, sabía que podía contar con él para lo que fuera, más sin embargo, no quería preocuparlo demasiado, así que con un gran suspiro se dirigió a la cocina para ver lo que Keito le había dejado.
Mientras comía, pudo escuchar que alguién tocaba a la puerta, de inmediato se imaginó que podría ser Keito, asi que con un tono entusiasta, como de costumbre, decia
-Voy!-
Pero al abrir la puerta, se llevo una gran sorpresa, Ryosuke se encontraba de pie del otro lado de la puerta.
-Yamada-kun...-
-Hola...-
-¿Que pasa?-
-Nada, en realidad, solo vine para... bueno.... en realidad... solo quiero hablar contigo-
-¿Eh? ¿Hablar?-
-Si... bueno... es que es algo... importante para mi hablar contigo sobre lo que paso anoche...-
Yuto no dijo nada y solo se hizo a un lado para dejar que Ryosuke entrara.

Al estar los dos juntos en aquella habitación, Yuto invitó a Ryosuke a tomar asiento, este acepto.
-No quiero andar con rodeos así que llegare al punto rápidamente-
Yuto sin comprender muy bien, asintió.
-¿Que es Keito-kun para ti?-
-¿Eh? ¿Keito?-
-Si-
-Pues es mi mejor amigo, nos conocemos desde hace tiempo-
-¿Solo eso?-
-Si... supongo que si-
-¿Supones?-
-¿Por que tantas preguntas?-
-Por nada, solo queria saber, simple curiosidad-
Yuto observaba detenidamente a Ryosuke, algo no andaba bien, estaba muy extraño, ni si quiera lo miraba, evitaba sus miradas a cada instante, no lograba comprenderlo en lo absoluto.
-No se la impresión que tengas de Keito, solo te voy a decir que el es un gran amigo para mi, y solo eso, y si lo que quieres saber es que si tengo algo mas que ver con el, pues te dire que tu idea esta completamente equivocada-
Yuto sonaba bastante serio y un poco molesto, aunque por dentro se sentia ligeramente feliz ya que esto significaba que Ryosuke estaba celoso de Keito.
-Yo en ningun momento pensé en algo así-
Mintió
-Es solo que tenia simple curiosidad de saber que relación tienes con Keito, eso es todo-
Yuto observaba fijamente a Ryosuke, ese trataba de mirar hacia otra parte, tratando de lucir como si nada de esto le interesara mucho, como si de lo que estuviesen hablando fuera cualquier cosa.
Pero para desgracia de Ryosuke, Yuto notó de inmediato la extraña actitud de Ryosuke, sabía que debía de haber algo más, y la actitud despreocupada que este intentaba mostrar a toda costa comenzaba a molestarlo, así que aprovechando que Ryosuke ya estaba ahi, y que ambos se encontraban a solas, Yuto pensó que este era el momento perfecto para aclarar las cosas de una vez por todas.
-Yamada-kun, ahora que tu ya me dijiste lo que querias, ahora me gustaría a mi decirte unas cosas, ¿Tienes tiempo?-
Ryosuke tratando de lucir despreocupado, acepto escuchar a Yuto, este primero se dirigió a la cocina y llevo a la mesa un par de vasitos con un poco de té caliente.

-A decir verdad, no logro comprenderte del todo, más sin embargo, sé que lo que pasó anoche por la llegada repentina de Keito te molesto y por eso te fuiste, ¿no es asi?-
Ryosuke solo bajo timidamente la mirada pero no respondió, ante tal reacción Yuto decidio continuar.
-Me gustaria que fueras completamente sincero ahora, quiero que sepas que con todo esto me confundes aún más, antes de que Keito llegara tu y yo estabamos en una... situación... muy diferente-
Al decir esto, el rostro de Yuto se ruborizó un poco, pero continuo hablando.
-Justo en el momento en el que creo entender lo que siento y lo que ambos podemos sentir, cambias completamente tu actitud y te vas dejandome... dejandome solo-
Al escuchar esto, Ryosuke pudo notar el vacio en la voz de Yuto,
-Yo... esa no era mi intensión Nakajima-kun... yo solo sentí que estarían mejor sin mi y quice irme a casa-
-No discutiré ese hecho contigo, lo que en estos momentos quiero saber es, que es lo que tu sientes-
La voz de Yuto era timida, se sentía avergonzado de decir algo así, pero si no lo hacia asi, jamás podría dejar las cosas claras con Ryosuke.
-¿En verdad necesitas que yo te lo diga? Por que ya te lo he expresado de muchas fomas, pero esta bien, si deseas que lo diga lo hare. Me gustas, me gustas mucho, no sé por qué siento esto por ti si ni siquiera te conosco del todo, como ya te había dicho antes, lo que siento por ti es real y verdadero y te aseguro que no te estoy mintiendo-
La mirada de Ryosuke era firme al igual que su voz, esto le servia a Yuto para darse cuenta de que el chico no mentía, de alguna forma esto lo tranquilizaba.

Ryosuke pudo observar una pequeña sonrisa en el rostro de Yuto, comprendió que este se sentia aliviado de alguna forma.
-Ahora es tu turno de decirme que es lo que tu sientes-
Al decir esto, Ryosuke se puso de pie y se acerco a Yuto, observandolo directamente a los ojos, este por mas que intentaba evadir la provocativa mirada del chico no podía, estaba atrapado, y antes de que pudiera decir algo, Ryosuke se acercó a él lentamente, tomo su rostro con sus manos, ambos se observaron fijamente a los ojos y lentamente ambos se acercaron y juntaron sus labios en un suave y profundo beso.
En aquel beso, Ryosuke pudo sentir la respuesta que deseaba escuchar, pero para el, esto no era suficiente, asi que lentamente termino con áquel beso pero siguió estando aún muy cerca del rostro de Yuto, el cuál lo observaba timidiamente, entoces, con un tono de voz bajo y seductor, le dijo.

-Sé que lo que sientes tus besos me lo han dicho desde anoche, pero yo aún deseo escucharlo con tu voz que es lo que sientes por mi, Yuto-

Lo había llamado Yuto, era la primera vez que Yamada pronunciaba su nombre, este hecho lo hizo muy feliz y de manera impulsiva se acerco a Yamada y lo beso de nuevo.
Este sin intenciones de negarse a aquel beso, lo recibio, y lentamente Yuto abrazó a Ryosuke por la cintura, acercandolo un poco más a su cuerpo.
Aquel beso se volvia cada vez mas intensos, la temperatura corporal de ambos chicos comenzaba a subir, en ese momento Yuto ya no tenía más dudas, todos sus miedos e inseguridades habían desaparecido, y es que Ryosuke tenía algo magico que siempre lo hacía sentir bien, estaba decidido a decirle a Ryosuke sus verdaderos sentimientos.

La mañana habia pasado y el día estaba aún nublado, si el clima pudiea expresar su estado de ánimo este día era el perfecto.
Al ver a Takaki con una expresión melancolica junto a la ventana, Chinen no pudo soportarlo, sabía que tenía que hacer algo, no podia soportar el ver a Takaki sumergido en tal depresión.

-Takaki... ¿Te gustaría salir a dar un paseo?-
Dijo Chinen con una enorme sonrisa, Takaki se giro, fingiendo estar de buen humor, acepto la invitación de su pequeño amado.
Al salir a las calles, Chinen decidio tomar la mano de Takaki, y ambos caminaron por las calles llenas de gente tomados de la mano.
En aquellos momentos, Takaki deseaba concervar el calor de Chinen para siempre, deseaba decirle que no se fuera, pero no podía hacerlo, el sueño de Chinen estaba en juego y no podía ser egoísta.
-Takaki, esperame aqui un momento-
Takaki se encontraba tan concentrado en sus propios pensamientos, que apenas logró escuchar lo que Chinen dijo, y cuando logro darse cuenta, este ya lo había dejado solo.
Confundido y comenzando a sentir desesperación, volteaba para todas las direcciones buscando a Chienen, y antes de que decidiera emprender el camino para buscarlo, este lo sorprendió por la espalda, abrazandolo con fuerza.
-Por favor Takaki... no hagas esto más dificil de lo que ya es, no pienses que eres el unico que sufre por esto, pero quiero que trates de comprenderme, yo te juro que voy a volver-
Sin poder decir nada, Takaki agacho la cabeza y lentamente solo toco las manos de Chinen, instantes despues, este solto a Takaki.
-Estoy aqui por que deseo pasar mi último dia en Japón contigo, asi que tratemos de pasarla bien y divertirnos ¿de acuerdo?-
Sijo Chinen con una enorme sonrisa, al mismo tiempo que una lágrima corria por su mejilla, Takaki comprendió que a Chinen le dolía esta situación al igual que a él, asi que sonrio de la misma forma honesta que Chinen, tomo su mano y caminaron juntos de nuevo.

Todo parecía indicar que nada podría interrumpirlos en esta ocasión, ambos avanzaban a un mismo ritmo, lento pero lleno de un sentimiento tan fuerte, que a ninguno de los dos les importaba nada más.
Los besos de Ryosuke eran cada vez más profundos, cada beso le robaba por completo el aliento, deseaba decirle a Ryosuke de una vez lo que su corazón sentía, pero aún no podía, sus labios se encontraban apasionadamente unidos a los de Ryosuke.

martes, 13 de octubre de 2009

Helpless Night [Cap.9]

Capitulo 9

Extrañado por la repentina invitación de Keito, no le quedaba otra opción más que aceptar.

-Se encontraba desayunando tranquilamente en casa, era el tipico desayuno familiar, mientras le daba una mordida a su pan, observaba como su hermano y su madre platicaban alegremente, normalmente, el no participaba en esas platicas, así que solo se limitó a seguir comiendo.
Al tomar un poco de leche, su telefono móvil comenzó a sonar, acababa de recibir un mensaje, y tranquilamente, mientras comia un poco de pan rebisaba el mensaje, al ver el remitente, se quedo sorprendido, comenzó a ponerse nervioso, era un mensaje de Inoo.
No sabía que hacer, con tan solo leer su nombre se sentía feliz, al leer el mensaje, casi se ahoga, tuvo que darse unos cuantos golpes en el pecho para poder pasarse el bocado, el mensaje sólo decia;
"Te estare esperando"
Eso era todo, nada más eso, ¿Que rayos significaba eso? ¿Acaso se refería a que seguía esperando por una respuesta a lo de ayer?
Confundido, Ryutaro respondio a áquel extraño mensaje.
"¿Que significa eso?"
Antes de que presionara el botón de enviar, dudó un poco, pero la ansiedad de saber lo que Inoo quería decir era más grande que su pasiencia, así que lo envió.
No pasó mucho tiempo cuando su telefono volvió a sonar, al leer la respuesta de Inoo volvió a sorprenderse,
"Estaré esperandote aqui todo el tiempo que sea necesario, aunque ese tiempo solo es de una hora, asi que no tardes demasiado (=^-^=)"
¿Pero que rayos quería decir con eso? ¿Qué lo estaba esperando? ¿En dónde?
Confundido y sin saber que responder, guardo el aparato en su bolsillo, se termino el resto de su leche de un solo trago, se puso de pie, rápidamente camino hacia la puerta y salió sin decir nada, su madre y su hermano lo observaron extrañados, de cierta forma estaban acostumbrados a la frialdad del chico, pero esta era la primera que que lo veian nervioso y ansioso al mismo tiempo, y es que si no hubiese estado tan absorto en sus pensamientos sobre Inoo, se habría dado cuenta de que su madre y su hermano lo observaban desde que recibió el primer mensaje.

Al salir de casa, miró hacia ambos lados, pensó que tal vez Inoo estaba cerca de ahi, pero no era así, ¿En dónde se supone que lo estaría esperando?
Pensó que tal vez estaría rondando por los alrededores, asi que de prisa, se puso en marcha para buscar a Inoo.
Mientras caminaba, desesperado buscaba al chico con la mirada, pero sin obtener los resultados que él hubiese deseado.
Resignado, al llegar al parque, se sentó en una de las bancas, suspiro profundamente, era extraño, rara la vez el suspiraba por algo, pero últimamente lo hacia muy seguido, esto sucedía cada que pensaba en Kei.
Trataba de imaginar en dónde podría estar esperandolo Inoo, mientras pensaba, observo a un niño pequeño comiendo un helado que al parecer era de chocolate.
-"Chocolate... ¿que tiene esa cosa para que le guste tanto?-
Pensó, entonces fue cuándo todo se volvio mas que obvio, era evidente que Inoo lo estaria esperando en la misma cafeteria de la vez pasada.
Asombrado por su descubrimiento, se pusó de pie rápidamente, observó su reloj, solo tenía veinte minutos para llegar a ese lugar, así que tendría que correr para llegar a tiempo, así que sin pensarlo más, comenzó a correr en dirección hacia aquella cafeteria, cada que se iba acercando, en su estomago sentía una sensación extraña, y al mismo tiempo, temía no llegar a tiempo.

Al llegar a aquella cafetería, entró, ignorando por completo a la mesera, buscó a Inoo con la mirada, al visualizarlo se aproximo a él a paso velóz.

Inoo se encontraba leyendo un libro tranquilamente, al sentir que alguien se encontraba de pie junto a él, bajo un poco su libro, al ver a Ryutaro de pie junto a él, con la respiración entre cortado, se sorprendió bastante.
Cuándo las miradas de ambos se cruzaron, Inoo pudo notar el leve rubor que apareció en las mejillas de Ryutaro, lo cuál provocó que sonriera un poco.

Para tratar de ocultar su nerviosismo se quejó de manera un poco molesta.
-¿No pudiste simplemente decirme que estarías aqui?-
Al decir esto, tomo asiento justo frente a Kei, ese solo lo miraba con una sonrisa traviesa en el rostro,
-Creí que era obvio que te estaría esperando aquí, aunque me doy cuenta que no fue así y te hice correr, pero viniste! No sabes lo feliz que me siento por eso-
Dijo Inoo mientras observaba al cansado Morimoto.
-¿Qué es lo que quieres?-
-¿Eso tampoco es obvio?-
Pregunto Inoo abriendo los ojos y mirando a Ryutaro de forma traviesa, esto provocó que el pequeño se sonrojará.
-Quería verte, eso es todo-
Normalmente, la sinceridad en las palabras de Inoo no le preocupaba, pero desde el día anterior, todo lo sincero que decía lo ponía nervioso y provocaba que su corazón latiese con fuerza.
-Quiero pensar que tu también querias verme, si no, no hubieses venido corriendo hasta aqui, ¿me equivoco?-
No, no se equivocaba, aquellas palabras hicieron que Ryutaro solo bajara la mirada timidamente, ante esta reacción Inoo solo sonrió.

Al llegar a un pequeño restaurante, Keito pidió algo de comer, le ofreció a Ryosuke algo y este se limitó a pedir lo mismo.
Cuándo a ambos les sirvieron su comida, Keito comenzó a comer tranquilamente, pero Ryosuke no lo hacía, no dejaba de observar con intriga a Keito
-¿No tienes hambre?-
Ryosuke no respondió nada, simplemente se limitó a observar fijamente Keito.
-¿Por qué esa mirada tan fría?-
-¿Qué es eso tan importante que tienes que decirme?
Ryosuke sonó firme y seguro, no le gustaba darle vueltas a las cosas, y más por qué sabía que se trataba de Yuto, esa era una buena razón para no esperar más.
-Bien, supongo que no tienes humor para andar con rodeos así que iré directo al grano, ¿Que intensiones tienes con Yuto?
-No creo que sea algo de tu incumbencia-
-Pues aunque no lo creas, es algo que me interesa saber, por que conosco a Yuto, y anoche pude darme cuenta de algunas cosas.-
Keito hablaba de una forma tranquila mientras le daba un trago a su jugo de naranja, mientras tanto, Ryosuke lo observaba intrigado.
-¿Que quieres decir?-
-Lo único que quiero que me digas es que quieres de Yuto, si lo vas a seguir haciendo a un lado por tus impulsos te advierto de una vez que lo dejes en paz-
En ese momento, la tranquila mirada de Keito se volvio fria, Ryosuke sintió aquella frialdad.
-¿A que te refieres con mis impulsos?-
-Me di cuanta de que mi presencia anoche te molestó, y por eso te fuiste, te fuiste sin pensar en como se sentía Yuto, eso para mi, ya es un punto menos a tu favor Yamada-kun-
No sabía que responder, era cierto lo que Keito estaba diciendo.

AL tomar asiento frente a Inoo, no sabía que hacer o que decir, en cambio Inoo observaba fijamente a Ryutaro con una sonrisa en los labios.
-¿Quieres algo?-
-Solo agua-
Ante la respuesta simple de Ryutaro, Kei se hecho para atras con una expresión de desilución.
-Tú no cambias! Pero no importa, sé lo que puedo hacer-
-¿Que haras?-
En ese momento Kei llamo a la mesera y le susurro algo al oído, Ryutaro, extrañado, solo lo observó, después, la mesera tomo nota y se fue.
-¿Que le dijiste?-
Inoo sonrió traviesamente y respondió.
-Le dije que se veía muy bonita-
-¿Ha?-
Morimoto no sabía como reaccionar, era extraño.
-¿Celoso?-
Dijo Inoo mirando a Morimoto de una forma intrigada. Este se ruborizo y desvió la mirada de inmediato.
-En lo absoluto!-
Inoo solo sonrio un poco, minutos después llego la mesera con una enorme malteada de chocolate con doble pajilla.
-¿De nuevo malteada de chocolate?-
Dijo Morimoto mientras observaba aquella malteada, Inoo con una enorme sonrisa solo asintió con la cabeza y comenzo a beber por una de las pajillas.
Ryutaro decidió esperar a que Kei terminase de beber para poder tomar un poco.
-Si no tomas algo ahora te aseguro que no quedara más-
-¿Eh?-
En ese momento Inoo dejó de beber y le acercó un poco el vaso a Morimoto, dándole a entender que podía beber ahora.
Timidamente, Ryutaro se acercó, tomo una pajilla y comenzó a beber, instantes despues Inoo se acercó, tomo la otra pajilla y también comenzo a beber.
Los rostros de ambos se encontraban demasiado cerca, provocando, una vez más que Morimoto se pusiera muy nervioso, y para ocultarlo, simplemente bajo la mirada.
De inmediaro, lentamente Inoo tomó las manos del pequeño con ternura, este al sentir las manos de Inoo soltó la pajilla y sus ojos se abrieron completamente, estaba sorprendido y muy ruborizado.
Sin decir nada, Inoo observo tiernamente a Morimoto, este trataba de evitar aquella mirada pero cada vez que la desviaba era nuevamente atraido por la mirada del mayor.
-Sé que te dije que no te presionaría, pero el tenerte tan cerca de mí y saber que no eres mio hace que me sienta desesperado-
Morimoto no sabía que decir, en el fondo sabía sus sentimientos hacia Inoo, pero no se atrevía a expresarlos, simplemente no sabía como hacerlo.
-Yo...-
No podía, por dentro lo estaba gritando pero no sabía como externarlo. Inoo se separo unos centimetro de él, soltando lentamente sus manos.
-Perdoname, no quiero presionarte, creo que no debi llamarte hoy...-
Morimoto observo la triste expresión de Inoo, esto no le gustaba, odiaba ver aquella expresión triste en la cara de Kei.
-Creo que tengo que irme, nos veremos mañana en la escuela ¿de acuerdo?-
No, no estaba de acuerdo, no quería que Inoo se fuera así, no con esa expresion de vació en sus ojos, no podía dejar que se fuera así, tenía que hacer algo.
De inmediato, antes de que Inoo decidiera ponerse de pie, fue ahora Morimoto quien tomo las manos de Inoo suevamente, entonces, se levanto un poco de su asiento, y sin decir una sola palabra, beso tiernamente a Inoo en los labios.
Inoo estaba completamente sorpendido, la iniciativa de Morimoto fue tan repentina que no supo como reaccionar, segundos despues Morimoto se separo de Inoo, y con el rostro completamente ruborizado, pero viendolo a los ojos le dijo.
-Aun no te puedes ir... esta cosa de chocolate aun no te la terminas...-
Inoo sonrió ante este comentario, tomo el rostro de Ryutaro entre sus manos y lo beso nuevamente.
Aquel pequeño beso terminó rápido, de inmdediato los ojos de Inoo recuperaron aquel brillo de siempre, Morimoto estaba tan avergonzado que no supo en que momento Inoo se termino su malteada.
Después ambos se pusieron de pie, Inoo pago la cuenta y salieron de aquella pequeña cafeteria.

Al estar fuera, ambos comenzaron a caminar, mientras esperaban poder cruzar la calle, lentamente Inoo tomo la mano de Morimoto, ese sin decir nada tomó la mano de Inoo y ambos siguieron caminando, a lo que al parecer para Ryutaro, sin rumbo alguno.
Momentos más tarde, llegaron a un pequeño parque, en donde ambos tomaron asiento.
-Ryutaro... oficialmete... ¿Quieres salir conmigo?-
Una vez mas, Inoo dejó sin aliento a Ryutaro, esta reaccion era algo que solo Kei podía lograr en él.
Timidamente, Ryutaro bajo la mirada, y con voz suave respondio.
-Si...-
En ese momento Inoo sonrió, su felicidad era tal, que no pudo evitar el abrazar con fuerza a Morimoto, este de igual forma abrazo a Inoo pero con menos fuerza, se sentía muy avergonzado, cuando el abrazo perdio fuerza, Ryutaro recargó su cabeza en el pecho de Inoo, este lentamente bajo la cabeza y buscó los labios de Ryutaro, al encontrarlos lo beso tiernamente.

viernes, 9 de octubre de 2009

Helpless Night [Cap.8]

Capitulo 8

Aquel profundo beso no parecía tener fin, ambos iban a un mismo ritmo, lento y tranquilo, como si cada segundo que se encontraban unidos fuese inmensamente delicioso, pero poco a poco, la pasión comenzó a incrementar, ambos sintieron all mismo tiempo aquella sensación de querer llegar más lejos, sabían que se necesitaban mutuamente, y en aquella noche tranquila, cualquier cosa podría pasar.

-Cuándo sentía la necesidad de llegar más lejos con Ryosuke, en su mente una idea lo atormentaba, ¿Que pasaría después de esta noche?
Yuto no quería que esto quedase en el olvido, tenía miedo de que así fuese, pero poco a poco, los movimientos de Ryosuke fueron despejando aquellos pensamientos.

Siguiendo un ritmo lento, Ryosuke rodeo lentamente el cuello de Yuto con ambos brazos, deseaba sentir a Yuto más cerca de él, no podía pensar en otra cosa.
A cada segundo, ambos se sentían más unidos, poco a poco, instintivamente, Yuto metio su mano por debajo de la camisa de Ryosuke, y de una forma tan delicada, acariciaba con suavidad su pecho.
Al sentir las manos de Yuto acariciando suavemente su pecho, un cosquilleo extraño comenzó a invadir todo su cuerpo, desconocia por completo aquel sentimiento, pero le agradaba.

Poco a poco, ambos dejaron de besarse, pero solo se vieron a los ojos un segundo porque de inmediato Yuto se acerco al cuello de Ryosuke y comenzo a besarlo con dulzura. Aquello era un sentimiento delicioso para Ryosuke.
Esta noche hubiese continuando siendo perfecta, pero sorpresivamente alguien tocaba a la puerta, interrumpiendo por completo a ambos.
Ambos se quedaron en silencio, mirandose fijamente, preguntandose si debian abrir o esperar a que esa persona se fuese y regresara en otra ocasión.
Incapaces de pronunciar alguna palabra, esperaban a que esa persona dejara de tocar la puerta, pero fue entonces cuándo se escuchó desde afuera la voz de un chico.
-Yuto-kun! ¿Puedo entrar? Soy Keito!-
Al escuchar quien era, la expresión de Yuto cambio por completo, estaba sorprendido, como si lo que acababa de escuchar hubiese sido alguna ilusión.

Ryosuke observó la expresión de Yuto, le intrigaba el saber que un chico viniera a ver a Yuto tan tarde.
-Voy a entrar...-
Al escuchar estas palabras, ambos chicos se separaron rápidamente, Ryosuke nervioso trato de lucir lo mas normal que podía, mientras tanto Yuto se puso rápidamente de pie para abrir la puerta.
-Yuto-kun! Crei que jamás abrirías!-
-Keito!.... ¿Que haces por aqui tan tarde?-
La voz de Yuto sonaba con un nerviosismo evidente.
-¿Estas ocupado?-
Preguntó Keito al notar aquel nerviosismo.
-¿Eh?... si... digo! no!... no estoy ocupado je... je... ¿Ocurre algo?-
Keito observó detenidamente a Yuto, sabía que algo no andaba bien.
-¿Esta todo bien Yuto?-
-Claro! Todo esta bien.... ja...ja... ¿por qué no habría de estar todo bien? je...je-
-¿Escondes algo verdad?-
-¿Esconder? ¿Yo?-
-Entonces, si no pasa nada, ¿Puedo quedarme esta noche contigo?-
-¿Eh? ¿Esta noche?-
-Lo que pasa es que ya es tarde para regresar a casa, el último tren salió hace unos minutos y no tengo como regresar a casa-
Yuto se quedo pensativo por unos momentos.

Ryosuke acababa de escucharlo todo, comenzó a sentirse molesto por alguna razón, así que de inmediato se puso de pie y se acercó a la puerta.
-Tengo que irme Nakajima-kun, nos veremos después-
Dijo observando a Yuto fijamente y un poco serio.

-Oh! pero si tienes visitas!-
Dijo Keito sorprendido al ver a Ryosuke.
-No tienes que...-
Dijo Yuto, pero fue interrumpido por Ryosuke, quien con un tono de voz firme dijo.
-No creo que tengas espacio para tres personas en este lugar, además puedo volver a casa en taxi-
Diciendo esto último observando algo molesto a Keito y utilizando un tono de voz sarcastico.
-Pero...-
-Nos vemos después-
Interrumpió de nuevo a Yuto, y pasando a su lado sin mirarlo de nuevo, salió del departamento, Keito tuvo que hacerse a un lado para dejarlo pasar.
-Es mi imaginación o se fue un poco molesto...-
Dijo Keito mientras observaba como Ryosuke se alejaba, al ver a Yuto se quedo completamente sorprendido, tenía una expresión de vacio en la mirada. de inmediato, Keito pudo imaginarse lo que ocurria.
-¿Quieres ir tras él?-
Yuto bajo la cabeza, después de unos segundos, al levantarla de nuevo, fingia una enorme sonrisa despreocupada.
-Esta bien, dejemos que se vaya, vamos! pasa, ¿Quieres algo de cenar?-
Keito entro al lugar cerrando tras de si la puerta, no respondío a la pregunta de su amigo, podía saber perfectamente que estaba fingiendo estar bien.

En cuanto escucho a Inoo decir que se tomara las cosas con calma, algo le oprimió el pecho, sabía que el sentía algo por él, pero aún no podía decirlo como este lo acababa de hacer.
Al llegar ambos a la esquina de una calle, Inoo solto a Morimoto.
-Bueno, yo me voy por este lado, espero verte mañana-
Y antes de que Ryutaro pudiera decir o hacer algo, sorpresivamente Inoo le dió un tierno beso en la frente.
Después, con una enorme sonrisa se despidió y se alejo lentamente.
Completaente ruborizado, Ryutaro observaba a Kei marcharse, se sentía feliz y al mismo tiempo nervioso, simplemente el corazón no dejaba de latirle con fiuerza, sentía en en cualquier momento este podría salir de su pecho. Al perder a Kei de vista, comenzó a caminar rumbo a casa.
En el camino, iba pensando en lo que había sucedido con Inoo, entonces recordó que él le dijo "Espero verte mañana"
Pero si mañana no se verían, o... ¿acaso Inoo lo estaría esperando mañana en la misma cafetería para una respuesta?
Esta duda lo agobiaba, no sabía que hacer, después de todo, nunca lograba comprender por completo a Kei.
Al llegar a casa, se dirigió directo a su habitación, al cerrar la puerta se dirigió a su cama y se recostó, mirando hacía el techo, recordando aquellas palabras de Inoo, y sin darse cuenta, se quedó dormido.

A la mañana siguiente, los rayos del sol calentaban un poco su rostro, al abrir con dificultad sus ojos observó que Takaki aún estaba dormido.
Al recordar lo que había sucedido, se ruborizo un poco mientras sonreia un poco, intento liberarse poco a poco de los protectores brazos de Takaki, cuando logró su objetivo, se puso de pie y se dirigió al baño, necesitaba una ducha.
Al no sentir a su pequeño amante entre sus brazos, comenzo a despertarse lentamente, cuándo logró abrir por completo sus ojos, buscó a Chinen pero no logaraba encontrarlo, por un momento pensó que este se había marchado, pero su corazón se tranquilizó al escuchar el sonido de la regadera, era obvio que él se encontraba allí.
Torpemente logro ponerse de pie y ponerse su ropa interior, buscó sus pantalones y se los puso, después se dirigió a la cocina, queria preparar algo para desayunar.
Minutos después, Chinen salió de la ducha, ya vestido pero con el cabello humedo, al acercarse al sillón notó que Takaki ya no se encontraba ahi, pero al escuchar un estruendoso ruido proveniente de la cocina, se apresuro a ir allí.

-¿Takaki?-
Se asomo temeroso.
-Estoy bien, solo que se cayeron estas cosas-
Dijo mientras levantaba dos recipientes de plastico grandes.
-¿Pero que haces?-
-¿No es obvio? El desayuno!-
Dijo mientras señalaba hacia la mesa, en donde ya estaba todo servido.
Chinen observo aquella mesa, era pequeña pero verla lista para que ambos desayunaran juntos la hacía lucir la mesa más perfecta del mundo.
Lentamente camino hacia la mesa, después tomo asiento.
Instantes después Takaki también tomo asiento.
-Itadakimasu~-
Dijo Takaki mientras tomaba sus palillos.
-Itadakimasu-
Dijo Chinen haciendo lo mismo, depsués ambos comenzaron a comer.

Minutos más tarde, Takaki preocupado se dirigió a Chinen.
-¿Te encuentras bien?
Esta pregunta sorprendió a Chinen.
-Si... ¿Por?-
-Bueno, deswpués de lo ocurrido, temía que estuvieras adolorido o algo asi...-
Dijo Takaki un poco avergonzado.
Esto provocó que Chinen sonriera.
-No te preocupes, estoy perfectamente-
Con un suspiro de alivio Takaki dijo.
-Que bien-
Después, ambos continuaron comiento, en realidad había algo más que Takaki quería saber, pero no se atrevía a preguntar, como consecuencía, casi no observaba a Chinen y se concentraba demasiado en su comida.
Chinen notó esta actitud, sabía que algo preocupaba a Takaki, y sabia muy bien lo que era, así que decidió decirlo.
-Me iré en tres días-
Takaki dejo de comer en ese momento, mientras tanto Chinen trataba de mantenerse distraido comiendo su arroz tranquilamente.
-¿No crees que es muy rápido? ¿Solo tres días más?-
Takaki sonaba desesperado, en tres días Chinen tendría que volver al extranjero en donde estaba estudiando.
-Pero solo será un poco más Takaki-
-Me gustaria decirte que no te vayas, que te quedes conmigo, pero no puedo hacerlo-
En ese momento, Chinen sabía que tenía que animar el ambiente.
-Pero si me lo estas diciendo justo ahora!-
Takaki observó a Chinen con desesperación.
-Pero no puedo exigirte que no te vayas-
-Puedes hacerlo-
Respondió Chinen con tranquilidad.
-Quiero que lo hagas, suplicame, exigeme que no me vaya-
Takaki observó sorprendido a Chinen, ese lucía de lo mas tranquilo, su mirada y voz eran tranquilas.
-Si lo haces, de todas formas me iré, pero puedes estar completamente seguro de que yo volvere, y cuándo eso suceda, ya jamás volvere a separarme de ti-
Estas palabras eran extrañas para Takaki, algunas veces Chinen hablaba tan serio que lo asustaba, pero al verlo a la cara, en sus ojos pudo ver sinceridad, lo que hizo que se tranqulizara, y con una sonrisa resignada dijo.
-Esta bien, yo te esperare aqui como siempre-
Ambos se sonrieron y continuaron comiendo.

Cuándo despertó, observó que se encontraba en su habitación, por un momento creyó que se encontraba con Yuto, pero recordó que un chico había llegado y que él había vuelto a casa, omitiendo el regaño que recibió por parte de su madre por haber llegado tan tarde, odiaba la idea de que alguien se encontraba con Yuto y no era él.
Este sentimiento era molesto y pesado, al ponerse de pie y verse en el espejo del baño, una idea paso por su mente, idea que lo asustó.
-"Acaso yo... ¿estoy celoso?"-
Mientras se observaba en el espejo, observó a un Ryosuke que no conocía, lucía molesto y frustrado.
Al reaccionar un poco, abrio la llave del agua y comenzó a lavarse la cara, no tenía por qué pensar de esa forma, después de todo, aquel chico solo es un amigo de Yuto, no tenía por qué preocuoarse, pero al pensar de nuevo en lo mismo, la angustía y en coraje regresaban, necesitaba distraerse, asi que se dio una ducha, se vistió y decidió salir de casa.
Al caminar por las calles, tan temprano y sin rumbo alguno, su estomago comenzaba a exigirle alimento, pensó en ir a alguna tienda para comprar algo, pero al deternerse, se llevo una gran sorpresa, se encontraba justo fuera del edificio en donde vivía Yuto, ¿Que hacía allí?
De inmediato pensó en darse media vuelta e irse de allí, pero justo en ese momento, Keito iba saliendo del edificio.
-Oh, pero si eres el chico de ayer!-
Ryosuke se sintió incomodo, no tenía nada que hacer allí más sin embargo ahi estaba, y el otro chico lo había descubierto.
-Ya no me presente bien ayer,mi nombre es Okamoto Keito, puedes llamarme Keito-
Ryosuke incomodo se presentó.
-Yamada Ryosuke... mucho gusto-
-¿Vienes a ver a Yuto tan temprano? Aún esta dormido-
¿Como diablos sabía que Yuto aún estaba dormido? ¿Acaso habían dormido juntos? Este comentario hizo enojar a Ryosuke.
-No importa, yo solo pasaba por aqui-
Keito observó a Ryosuke detenidamente, supo de inmediato que el chico estaba molesto, simplemente su cara lo decía todo.
-¿Estas ocupado Yamada-kun?-
-¿Eh?-
-Quiero hablar contigo-
Keito le sonrió a Ryosuke, mientras este, extrañado, no sabía que responder.
-¿De que quieres hablar conmigo?-
-No me gustaría que platicaramos aqui, te invito algo de desayunar, vamos!-
-Pero...-
En ese momento, el estomago de Ryosuke volvió a sonar, exigia algo de alimento en ese instante.
-Vamos! Yo invito! Es importante que tu y yo hablemos-